Los detenidos por apalear a un joven en Amorebieta tienen antecedentes violentos y pertenecen a “Los Koalas"

Los 8 detenidos por la brutal paliza a un joven en Amorebieta, que sigue grave, forman parte de la banda juvenil “Los hermanos Koala” y tienen antecedentes como organización violenta. Cinco de ellos son menores de edad y alguno ha estado tutelado por la Diputación de Bizkaia.

Los arrestos se han producido en distintas localidades de Bizkaia, territorio en el que operaban, y todos pertenecen a la “pandilla violenta” autodenominada “LHK”, que no es nueva, tampoco sus comportamientos delictivos, y que ahora "emerge a través de una generación más joven".

Así lo ha explicado el vicelehendakari y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, quien ha advertido que la investigación del salvaje ataque sigue abierta y no descartan más detenciones. El goteo de arrestos ha sido constante desde que ayer se entregara uno de los presuntos agresores.

Desmantelados grupos violentos

Entre los delitos imputables, está claro el de agresión, pero non se descarta el de intento frustrado de homicidio. Aún hay que esperar a recoger los testimonios y más evidencias para contar con un "respaldo documental y testifical más sólido" que permita argumentar los cargos porque "no vale solo con un vídeo".

"Habrá que ver cuál era realmente la voluntad de los agresores, si la voluntad era provocar una lesión o iba más allá, en sintonía con quienes les jaleaban (al grito de “¡Mátale!”), y pretendían incluso acabar con su vida de manera violenta", ha indicado Erkoreka, quien ha celebrado que estas operaciones permiten a la Ertzaintza avanzar en el "desmantelamiento" de grupos que ejercen la violencia "de manera indiscriminada" en distintos lugares de Euskadi.

Palabras del padre de la víctima

Eugenio, el padre del joven de 23 años que sufrió la agresión grupal el pasado domingo en la localidad vizcaína de Amorebieta, ha afirmado que su hijo se encuentra en estado "muy grave", aunque ha añadido que los médicos "son optimistas". Un amigo de la familia ha confirmado la situación de gravedad de la víctima: "Se debate entre la vida y la muerte".

Muy abatido, Eugenio ha dirigido unas breves palabras a los medios de comunicación en el exterior del hospital de Cruces, en Barakaldo, donde se encuentra ingresado el joven. El padre le ha visitado después de que ayer fuera sometido a una intervención quirúrgica.