Firman un contrato de arras: los expertos desvelan las claves para no perder dinero
Conoce los puntos básicos y los tipos de arras que existen para asegurar la compraventa de una vivienda sin imprevistos y proteger tu inversión
Pamplona - Publicado el
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El contrato de arras es un paso fundamental en la compraventa de una vivienda, un local o un terreno. La experta inmobiliaria Sandra Tardáguila, de A10 Inmobiliaria, lo define como "un acuerdo privado que se firma cuando comprador y vendedor quieren reservar una vivienda" antes de formalizar la escritura definitiva ante notario. Entender sus implicaciones es crucial para evitar problemas legales y pérdidas económicas.
Los tres pilares del contrato de arras
Todo contrato de arras debe constar de tres puntos básicos para ser completo y seguro. En primer lugar, se debe especificar el tipo de arras que se firma. En segundo lugar, es imprescindible fijar un plazo máximo para escriturar. Por último, Tardáguila subraya la importancia de adjuntar una "nota simple actualizada", ya que no tenerla al día "puede retrasar todo el proceso".
Tipos de arras: diferencias clave
Existen principalmente dos modalidades de arras: las confirmatorias y las penitenciales. La elección entre una y otra determinará las consecuencias en caso de que una de las partes decida no seguir adelante con la operación.
Las arras confirmatorias, según explica la experta, "no dan derecho a desistir". Su función es servir como anticipo y prueba del contrato. En caso de incumplimiento por una de las partes, "la parte cumplidora nos puede exigir daños y perjuicios".
Por otro lado, las arras penitenciales sí permiten desistir del contrato. Si quien se retira es el comprador, este pierde la cantidad entregada como señal. Sin embargo, si es el vendedor quien se echa atrás, las consecuencias son diferentes.
Si es el vendedor el que se echa para atrás tiene que darle el doble"
En el caso de las arras penitenciales, si el vendedor desiste, "tiene que darle el doble, que es lo que ya le ha dado el comprador más la penalización". Por ejemplo, para una señal de 15.000 euros, el vendedor tendría que devolver esos 15.000 euros junto a otros 15.000 euros de penalización. De esta forma, ambas partes arriesgan la misma cantidad.
Errores a evitar a toda costa
La correcta redacción del contrato de arras es fundamental para garantizar la seguridad jurídica de la operación. La experta advierte sobre prácticas que pueden invalidar el acuerdo o generar conflictos legales graves entre las partes implicadas.
Llamar a ras a un simple recibo puede hacerte perder la capacidad de exigir o retener las cantidades"
Entre los errores más graves se encuentra "no dejar plazos abiertos", mezclar arras confirmatorias con penitenciales o "llamar arras a un simple recibo, a un papel, sin cláusulas claras". Estas imprecisiones, concluye Tardáguila, "puede hacerte perder la capacidad de exigir o retener las cantidades" pactadas.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.