La Guardia Civil en La Rioja alerta sobre la estafa de los 'falsos operadores de electricidad', en la que los estafadores, haciéndose pasar por trabajadores de diferentes compañías eléctricas, llaman de forma apresurada a las víctimas, principalmente a propietarios de establecimientos hosteleros, tiendas de alimentación, etc.

Estos falsos operadores manifiestan a sus víctimas que sus contratos son erróneos o que tiene facturas de luz impagadas y/o devueltas, comunicándoles el importe total al que asciende la deuda, reclamando el pago inmediato de dicha deuda o, de lo contrario, cortarán la luz del comercio o empresa en ese momento.

De esta forma, para evitar el perjuicio económico que les podría ocasionar un corte de luz, las víctimas acatan las instrucciones y realizan la transferencia bancaria que les solicitan o aportan las numeraciones y códigos de sus tarjetas bancarias para que se proceda a efectuar el cobro.

A fecha de hoy, la Guardia Civil en La Rioja tiene conocimiento de un total de cinco estafas llevadas a cabo por este método en diferentes localidades de la comunidad, superando la cuantía economía estafada los 13.000 euros. A las victimas les hicieron creer que sus tarifas contratadas eran erróneas, o tenían recibos impagados y/o devueltos.

Para prevenir y mejorar la concienciación de este tipo de estafas se recomienda no llevar a cabo pagos hasta haber verificado convenientemente la veracidad de las reclamaciones por distintas vías, trasladando al llamante que verificará este hecho con el gestor personalmente o que se ocupará el mismo de este asunto.

Por otro lado, la Guardia Civil de La Rioja también tiene constancia de que, en los últimos día, se vienen realizando diversos intentos de estafa mediante el envío de SMS que suplantan la entidad Correos España y Correos Express. La técnica empleada en este tipo de estafas es conocida como 'Smishing' debido al uso de SMS, siendo utilizada para la obtención de datos relacionados con tarjetas de débito o crédito y así realizar cargos no consentidos a la víctima en sus cuentas.

Este SMS incita los receptores a acceder al enlace que le han enviado. Una vez lo pulsa le redirige a una página fraudulenta de aspecto similar a la de Correos para rellenar un formulario con los datos de la tarjeta bancaria, realizar el pago y liberar el falso envió. Una vez los ciberdelincuentes tienen en su poder todos los datos de la tarjeta de crédito -nombre y apellidos, número de tarjeta, fecha de caducidad y código CVV- comienzan a realizar cargos fraudulentos a sus víctimas.