Amanda Muñoz, joven investigadora riojana: "Quiero seguir formándome fuera y traer nuevas técnicas a España"

La joven riojana Amanda Muñoz es biotecnóloga. Una joven que está iniciando su carrera en el mundo de la ciencia. Está realizando el último curso de un doctorado en Barcelona

Rocío Ruiz Logroño

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 17:38

La joven riojana Amanda Muñoz es biotecnóloga. Una joven que está iniciando su carrera en el mundo de la ciencia. En estos momentos está realizando un doctorado en Barcelona (en el último curso) y el año pasado desarrolló una estancia en Houston. Esta joven investigadora relata en COPE algunas de los proyectos en los que se centra su trabajo.

Junto a su equipo, esta riojana trata de evaluar la toxicidad de los nanomateriales y para ello comprueban sus avances en un gusano que tiene una homología genética de un 60-80% con el ser humano. Sus avances se aplicarán en muchos ámbitos, por ejemplo en una alimentación más saludable.

Nacida en Fuenmayor, "he realizado todos mis estudios en la escuela pública, donde mis professores me animaron a descubrir lo que a mí más me gustaba, que es la ciencia y en particular la Biotecnología Para mi etapa universitaria, me tuve que desplazar a Barcelona, ya que en La Rioja no teníamos esa carrera por el 2014, aunque ahora sí que tenemos un máster en Biotecnología disponible en la UR.

En Barcelona he estudiado Biotecnología y Master en Nanociencia y Nanotechnología Avanzada en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). Decidí entonces, motivada por el proyecto propuesto por mi supervisora la Dr. Anna Laromaine, empezar un doctorado en Biotecnología en la misma universidad (UAB). Aquí descubrí por primera vez el modelo C. elegans, del que había oído hablar en la carrera, pero que una no conoce bien hasta que trabaja con él":


"Este gusano de 1 mm de longitud, comparte un 60-80% de homología con los humanos, crece de huevo a adulto en 3 días y es fácil de mantener en el laboratorio. Se utiliza como modelo para investigar las principales rutas metabólicas de procesos complejos que pasan en las células y así poder entender qué pasa. ¿Lo bueno? Que se puede trasladar la mayoría de los descubrimientos a humanos. Se utiliza también para entender enfermedades complejas, como el Alzheimer, cáncer o Parkinson".


"En mi caso, lo utilizamos para evaluar la toxicidad de nuevos nanomateriales (materiales muy muy pequeños) que se están desarrollando para su uso en medicina y alimentación. La ventaja de estos materiales es que son diseñados para llegar de forma específica al lugar que hay que tratar (por ejemplo, un tumor, en el caso del cáncer) y entregar un fármaco".

"La nanomedicina es un campo puntero que desarrolla una gran cantidad de nanomateriales diferentes por día, y para realizar un cribado de cuáles son seguros y potencialmente útiles, utilizamos al gusano C. elegans. Pero esto es solo una primera evaluación, ya que luego debe seguir la evaluación de seguridad con modelos más complejos como ratones, antes de llegar a humanos".

Tal es la utilidad de dicho modelo, y su uso en la comunidad científica, que el pasado mes de octubre se realizó un congreso nacional en el CIBIR que reunió a diferentes grupos que trabajan con este modelo. "No pude asistir debido a mi estancia doctoral en Houston con el Dr. Buck Samuel, donde aprendí diferentes técnicas microbiológicas que ahora he traído de vuelta a mi grupo en Barcelona. Mi objetivo personal, es cada día aprender algo nuevo, ayudar a la sociedad tanto desde el lado científico como a que esta comprenda, mediante divulgación científica, en lo que estamos trabajando".