El centro de emergencia para mujeres de Vigo: un salvavidas para las víctimas de violencia de género

El perfil de la víctima: aumentan las mujeres inmigrantes sin red de apoyo que necesitan ayuda profesional

Redacción COPE Vigo

Vigo - Publicado el

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En el marco de la conmemoración del 25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la atención se centra en los recursos esenciales que ofrecen una tabla de salvación inmediata a las víctimas. Uno de ellos es el Centro de Emergencia para Mujeres Víctimas de la violencia de género de Vigo, una instalación vital que proporciona acogida y apoyo integral a quienes buscan escapar de la agresión.

Para comprender mejor esta labor, conversamos con Ana Martínez, integradora social que forma parte del equipo profesional de este centro. Este centro forma parte de la Rede Galega de Acollemento y está gestionado integralmente por el Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar, en colaboración con la Secretaría Xeral para a Igualdade.

¿cómo funciona este centro para víctimas de viogen?

El principal cometido del centro es ofrecer un alojamiento inmediato y de corta estancia a las mujeres víctimas de maltrato (físico, psíquico, económico o sexual) y a las personas que dependen de ellas. "Las recibimos porque no tienen una acogida habitacional o tienen que hacer una separación del agresor, en primera instancia", explica en COPE Ana Martínez. El centro garantiza atención continuada todos los días del año y el ingreso provisional tiene una duración de cinco días para una valoración psicosocial y la elaboración de un plan de intervención. La estancia máxima de permanencia es de tres meses, aunque puede haber prórroga en casos excepcionales.

El acogimiento incluye a la mujer agredida y a la familia que tenga a su cargo, incluyendo personas con discapacidad o personas mayores. Una vez que son acogidas, se establece un plan de trabajo individualizado. El equipo profesional, que incluye directora-coordinadora, abogada, psicóloga, trabajadora social y educadoras sociales, ofrece asistencia completa. Se brinda ayuda psicológica, considerada fundamental para que las mujeres se "reconstruyan, estén con autoestima fuerte y puedan salir adelante". También disponen de una abogada para ayudarles con los pasos burocráticos y se les asiste en la búsqueda de una fuente de ingresos si carecen de ellos.

 El rostro de la vulnerabilidad: mujeres extranjeras  

Al preguntar sobre el perfil de las mujeres atendidas, Ana Martínez destaca la diversidad, señalando que "los perfiles son bastante dispares" y que la violencia afecta a mujeres de todo tipo, con o sin grandes formaciones, y de distintas clases sociales.

Sin embargo, en los últimos años, sí han observado una tendencia preocupante: "lo que sí hay es mujer inmigrante". Estas mujeres, que a menudo carecen de una red de apoyo social y están solas en el país, son las que más acuden a los servicios del centro. Martínez subraya que los colectivos más vulnerables son los que más sufren, especialmente aquellas que acaban de llegar a España, tal vez sin documentación todavía y con cargas familiares.

En ocasiones, estas mujeres pueden provenir de países donde la violencia está "tristemente un poco más normalizada", percibiendo al hombre como el más dominante. Este factor cultural se suma a su vulnerabilidad, ya que la falta de recursos y redes las convierte en las que más ayuda necesitan.

El proceso de ingreso requiere rigor documental. Las víctimas deben ser derivadas por la Rede Galega de Acollemento, los Centros de Información a las Mujeres (CIM), servicios sociales o Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Para ingresar, se requiere documentación de identidad y una copia de la denuncia presentada o el compromiso de interponerla en las 72 horas posteriores al ingreso.

Ana Martínez concluye resaltando la importancia de la formación e información, especialmente para la juventud, aunque lamenta que, en general, las mujeres víctimas a veces tarden en darse cuenta de que están sufriendo la agresión. El centro de emergencia en Vigo continúa, día tras día, siendo un pilar fundamental para la reconstrucción de las vidas de las víctimas.