De A Milagrosa (Lugo) a Berlín: un viaje entre dos mundos

Hace ocho años, en COPE Lugo, conocimos a Pablo Flórez, un lucense que dejó una huella en todos los que compartimos con él esos días de trabajo. Desde entonces, su vida ha dado un giro sorprendente, y hoy reside en Berlín, Alemania, donde desempeña funciones en el área de Recursos Humanos de una multinacional química

Chema Núñez

Lugo - Publicado el

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Pablo, originario de Lugo y con experiencia en algunas de las empresas más destacadas de su ciudad, nos comparte algunos detalles sobre su nueva vida en la capital alemana. A pesar de que desde aquí se habla de una "crisis económica" en Alemania, él nos recuerda que los alemanes siguen siendo una sociedad profundamente industrializada. "A industria alí ten unha altísima demanda de enerxía e claro co freazo do gas ruso, a economía bávara acusa o golpe", explica Pablo, destacando la resistencia y las dificultades que atraviesa el sector industrial alemán en estos tiempos.

Diferencias entre Lugo y Berlín

Una de las primeras diferencias que Pablo nota entre su Lugo natal y su nuevo hogar en Berlín son las distancias. En Berlín, "hai que usar frecuentemente o transporte público", algo que en Lugo no era necesario. "Aquí os desprazamentos pódense facer a pé ou en coche particular", comenta.

Aunque tanto Lugo como Berlín son ciudades con una diversidad cultural palpable, Pablo reconoce que la experiencia en una gran metrópoli como Berlín es diferente. "Vivir nun barrio tan multicultural como o da Milagrosa ten a súa cousa, pero Berlín é diferente. Aínda que tamén é unha sociedade diversa, non é o mesmo". La sensación de estar en una ciudad tan grande también tiene sus consecuencias, como explica: "o que máis notas no día a día é que te perdes moitísimas cousas, porque sendo tan grande todo sempre hai moitas cousas que ocurren e te perdes".

Sin embargo, a pesar de las diferencias, Pablo menciona que las rutinas diarias no son tan dispares. "En Berlín tamén me vou a durmir nunha cama e uso o ascensor para subir e baixar. As rutinas son as mesmas". No obstante, lo que realmente cambia es la ausencia del entorno familiar y de amigos. "Non ter o teu entorno de aquí, a familia e os amigos, é a gran diferencia", aunque destaca que en Berlín ya tiene su grupo de amigos y que "todo flúe tamén como se fose aquí". 

Lugo y sus Nuevas Propuestas

Recientemente, Pablo volvió a Lugo y no dudamos en preguntarle si notaba alguna diferencia en la ciudad que le vio nacer. Entre las cosas que más le gustan de Lugo, Pablo destaca la peatonalización del centro. "Gústame moito a peonalización, é un avance que permite que os maiores e os nenos poidan disfrutar dos espazos peoniles". Aunque también reconoce que, si él pudiera, haría alguna modificación: "Seguro que cada un faría unha peonalización ao seu gusto". Sin embargo, uno de los aspectos que echa de menos en Lugo son los espacios verdes. En Berlín, según Pablo, se cuidan mucho estos espacios y la ciudad es famosa por su abundante vegetación.

Desafíos en las Comunicaciones y Consejos para los Viajeros

Uno de los desafíos más notables de vivir en Berlín es la falta de conexiones directas desde Lugo. "As comunicacións con Berlín son moi complicadas", lamenta Pablo. Para viajar desde Lugo, a veces es necesario hacer escala en Oporto o Madrid, e incluso viajar hasta Frankfurt, una ciudad en el otro extremo de Alemania. Sin embargo, Pablo sigue recomendando Berlín como un destino para visitar y disfrutar de su historia y su cultura. Entre sus lugares favoritos están la famosa Puerta de Brandenburgo, el East Side Gallery, donde se conservan pinturas de artistas internacionales tras la caída del muro, y el Tiergarten, un pulmón verde que es el "Central Park" de Berlín.

Aunque los contrastes entre su ciudad natal y Berlín son evidentes, Pablo se muestra agradecido por la experiencia que le ha permitido crecer tanto profesional como personalmente. Su conexión con Lugo sigue siendo fuerte, y no es raro que regrese a Galicia con frecuencia para recargar energías y compartir recuerdos de su tierra.

El 24 de este mes, Clara y Pablo regresan a Berlín, pero seguro que seguirán llevando un trozo de Galicia en el corazón, mientras tratan de hacer crecer las conexiones entre el norte de Europa y su querida Lugo.