Las joyas robadas del interior del museo de la catedral de Plasencia (Cáceres), entre ellas la corona de la Virgen del Puerto, patrona de la ciudad, están valoradas en más de un millón de euros, según ha afirmado este lunes el alcalde de la ciudad, Fernando Pizarro.

El robo de esta corona, así como de otra correspondiente al Niño Jesús, dos cruces pectorales varios anillos episcopales, se produjo en la madrugada del sábado al domingo.

En declaraciones a los periodistas, Pizarro ha manifestado que son horas difíciles y tristes para Plasencia, pues el robo de estas joyas expuestas en el museo catedralicio han supuesto "un duro golpe para la ciudad, no por el valor material, que lo tiene, sino también por el valor emocional".

"Hablamos de la corona que el nuncio de su santidad colocó a la imagen de la Virgen el 27 de abril de 1952 en el acto de la coronación canónica como patrona de la ciudad", ha detallado.

El alcalde ha dicho que las investigaciones de la Policía Nacional ya están en marcha con el objeto de "recuperar estas joyas de todos los placentinos y de toda la gente que tiene devoción a la Virgen del Puerto".

"Tenemos muchas esperanzas en que las pesquisas del Cuerpo Nacional de Policía tengan un final feliz y podamos volver a contemplar esa joya que entre todos se le regaló a la imagen", ha concluido.

SUCESO

En Plasencia, ya se ha abierto una investigación para tratar de averiguar quién o quiénes robaron en la madrugada de este Domingo de Ramos en el Museo de la Catedral.

Objetos de mucho valor económico, como te contamos, pero también sentimental para todos los placentinos, un robo que “duele en el alma” destacaba el obispo, Ernesto Brotons.

Los ladrones accedieron al museo catedralicio a través de la barbacana, por medio de una escalera y lograron entrar en el museo por una ventana, forzando las rejas. Todos los elementos robados, se encontraban en la misma sala, junto a otros cálices y custodias, pero el o los ladrones, sólo se han llevado las coronas de oro mazizo, la de la virgen y el niño, un par de cruces pectorales y algunos anillos episcopales; no han tocado nada más, con lo que según fuentes consultadas por COPE estos ladrones habrían ido a tiro hecho, a por esas joyas en concreto, y ninguna más.

Para hacerse con ellas, habrían roto las vitrinas de cristal que las protegen y destrozado las cámaras de seguridad.