Trienio maldito

Más de dos décadas después, el Valencia CF volverá a encadenar tres temporadas alejado de las competiciones europeas. El noveno puesto en el que ha acabado LaLiga 2021-22 (a nueve puntos de la Conference League, a 14 de la Europa League y a 22 de la Champions) le vuelve a dejar en tierra de nadie... un año más.

La temporada pasada fue 13º y la 2019-20 acabó también noveno. Lejos de los ingresos que permiten dar un salto de calidad y que establecen una distancia cada vez mayor con aquellos equipos que sí jugarán en Europa. De hecho, los siete primeros clasificados han sido los mismos (aunque no en idéntico orden) en las dos últimas campañas.

Desde que Meriton Holdings está al frente de la mayoría accionarial del club han pasado ocho temporadas y en sólo tres de ellas (2015, 2018 y 2019) el equipo ha conseguido la clasificación para disputar competiciones continentales. Una clara demostración del declive al que Peter Lim y los suyos han empujado a esta entidad centenaria que, de hecho, no estaba tanto tiempo fuera de Europa desde finales de la década de los 80 del anterior siglo.

Entonces el club valenciano quedó apeado de los torneos europeos desde 1983 a 1989, una etapa en la que incluso llegó a jugar en Segunda División (campaña 86-87).

De esta manera, el 10 de marzo del próximo año se cumplirán tres años del último partido internacional del Valencia CF. Fue justo antes del parón por la crisis del coronavirus, con la Atalanta italiana como rival y supuso la eliminación de los ches en los octavos de final de la Champions League.

El presente es poco halagüeño, pero el futuro pinta aún peor. La desafección y la distancia a la que se ha llevado a la afición quedó patente en la manifestación del sábado que mantuvo repleta la calle, mientras Mestalla estaba casi desierto, mientras el equipo cerraba una temporada para el olvido. Otra. Nada nuevo en el pasado más reciente. Desgraciadamente.