Marcelino se emociona pensando en su vuelta a Mestalla

Vuelve Marcelino a Mestalla. Regresa, por primera vez, al lugar donde fue inmensamente feliz. En València, Marcelino García Toral pasó dos temporadas de éxito. En lo deportivo y también en lo personal. Con él en el banquillo, el equipo regresó a la Liga de Campeones dos años consecutivos. Además, alcanzó en su primera campaña las semifinales de Copa del Rey y de Europa League. Y un año más tarde, se alzó con la Copa del Rey en el Villamarín frente al FC Barcelona, llevando un título a las vitrinas del club 11 años después.

Marcelino trajo la gloria perdida y con él, todo son buenos recuerdos para la afición. Su despido cayó como una losa sobre el valencianismo y con ello, se regresó a la oscuridad. Mañana, volverá a pisar Mestalla. Y tanto para él como para la gente, no será un día cualquiera.

“En lo deportivo es un partido igual que cualquier otro. Defiendo al Athletic y como tal, tendré la misma intención de ganar igual que cualquier otro. En lo emocional es diferente a todos los demás; para mí. Ya os expliqué lo que debió sentir Iraola. Esta es la primera vez que voy a València, a Mestalla… será complicadillo, sí. Pasamos allí dos años extraordinarios a nivel profesional. Jugué la Champions con el Valencia, dos veces. Ganamos una Copa del Rey, semifinal de Copa, semifinal de Europa League. Son muchos grandes momentos vividos con el club, dentro, con muy buenos futbolistas a los que les estoy, agradecido de por vida. Y con una afición que me trató increíble. Incluso en una etapa del segundo año que vivimos una situación complicada”, aseguró visiblemente emocionado el técnico asturiano en sala de prensa.

“Todo entrenador cuando va a un sitio, desea tener o lograr los éxitos deportivos que logramos allí y a la vez tener el cariño de la afición. Es difícil. Pero repito, en el terreno deportivo, vamos con la intención de ganar”, sentenció.

Preguntado por su salida, Marcelino asegura que fue “sorprendente para todos”, pero que prefiere quedarse con los buenos momentos en el recuerdo. “Yo creo que mejor calificativo no puede haber: fue sorprendente pero es pasado. Creo que tengo bastantes defectos y algunas virtudes. Entre estas, no está el rencor. Los momentos suceden, se afrontan y vives el presente. Del pasado olvido los malos momentos y quedo satisfecho con los buenos, que son los que perduran. Llega un dirigente, destituye a un entrenador. La opinión absoluta es que no correspondía y fue una sorpresa para todos. A partir de ahí, a seguir con lo siguiente”.

El partido tiene morbo. Hoy, el banquillo valencianista lo ocupa José Bordalás. Y la relación entre ambos, nunca fue buena. Pese a ello, Marcelino (al igual que Bordalás) ha asegurado, que se saludarán antes del encuentro. “Corresponderé al saludo de Bordalás porque así me educaron mis padres. Representamos a dos grandes clubes y yo estuve allí dos maravillosos años”.

Vuelve Marcelino a casa. El hombre que devolvió la gloria al club. La persona que convirtió al Valencia CF, en aquel equipo competitivo que tanto anhelaba la grada. El último entrenador que levantó un título al cielo; en el año del Centenario. Mestalla lo espera con los brazos abiertos.