COPA DAVIS
Cascales: “El desgaste de Alcaraz es alto, pero tiene muchas ganas de jugar la Copa Davis”
Persona de confianza del nuevo número uno del mundo del tenis, Antonio habla en COPE sobre el US Open, la cita con España en València y el crecimiento del jugador
Cascales: “El desgaste de Alcaraz es alto, pero tiene muchas ganas de jugar la Copa Davis”
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Una de las personas que más conoce a Carlos Alcaraz es Antonio Martínez Cascales, mano derecha de Juan Carlos Ferrero durante toda su carrera y ahora parte del entorno que trabaja para ayudar a triunfar al murciano. Alcaraz llegó hace cinco años a la Academia Equelite de Juan Carlos Ferrero y este domingo se convirtió en el número uno del mundo para joven de la historia del tenis. Ahora encara la Copa Davis en València para defender los colores de un país que vive feliz por sus logros. En Deportes COPE Valencia hemos hablado con Cascales.
¿Va a Alcaraz jugar mañana miércoles en la Copa Davis?
Creo que habrá que esperar al viernes, pero no es seguro todavía. Hay un problema: viene con un montón de sets en las piernas, diecinueve a alta intensidad. Habrá que mejorar esto de cara al futuro porque esta vez ha habido mucho desgaste. Es normal que lo haya, pero esta vez ha habido mucho. Entre ese cansancio y el jet lag… Se evaluará, pero corre peligro a nivel de salud si no descansa hoy y mañana por la mañana y luego ver cómo va todo. Él está con muchas ganas, es joven, a veces hay que pararlo un poco.
Alcaraz ya está en València para jugar la Davis
¿España es favorita en la Davis?
Somos favoritos. Tenemos muchos jugadores muy buenos. Hay bajas irreparables: Rafa es insustituible y Carreño ha tenido un problema en el pie. También Davidovich. El resto del equipo que queda es fenomenal. Roberto Bautista es un seguro en este tipo de pista y el resto del equipo es fenomenal. Serbia trae un equipo compensando aunque no venga Djokovic. Creo que España se clasificará para Málaga.
¿Imaginaban este éxito de Carlos Alcaraz?
Cuando empezó a venir hace cinco años, no como alumno de la Academia sino para hacer algunos entrenamientos gracias a su manager Albert Molina, que ya lo estaba preparando para traerlo del todo, se estaba preparando el camino. Ya nos había traído a Nico Almagro y Pablo Carreño. A los quince ya empezó a venir, primero tres o cuatro días y luego a su casa, y después le dijimos a sus padres que tenía que venirse ya a este entorno a pasar la semana en la Academia y el fin de semana en casa. Lo tuvimos claro Juan Carlos (Ferrero) y yo desde el primer día. Él no lo habría cogido si no le hubiera visto una personalidad distinta: un tío humilde, muy trabajador, que le gustaba el tenis una barbaridad y muy agradecido. Cada vez que acaba el entrenamiento viene a agradecer a todos los que estamos en la pista. También el otro día en el calentamiento de la final del US Open. Pensábamos que si no pasaba nada raro lo veíamos número uno, quizás no tan pronto con 19 años. Le quedaba todavía un año entero por delante para cumplir el récord de precocidad como número uno del mundo.
¿Qué siente a nivel personal por haber trabajado con Ferrero y Alcaraz?
Nunca me ha gustado la palabra orgullo. Empecé en Villena con una pista y ahora tenemos una de las academias más reconocidas del mundo con viente pistas, una residencia para 140-150 jugadores… Siento felicidad. Estamos en un momento muy bueno. La felicidad te la da trabajar en algo que te gusta también. Estoy como en una nube. En la grada del US Open estaba emocionadísimo de ver a Juan Carlos, al padre de Carlos… Solo faltaba Eduardo Ferrero (padre de Ferrero) que habría sido el hombre más feliz del mundo.
El flamante campeón del US Open y número 1 del mundo