Tres años después del incendio que arrasó 19.000 hectáreas en Castellón: "La naturaleza es muy sabia"
El incendio forestal originado en Bejís obligó a evacuar a 2.000 personas
El incendio de 2022 quemó todo el término municipal de Torás que empieza ya a recuperarse
Castellón - Publicado el
3 min lectura
Se cumplen tres años de la mayor catástrofe medioambiental de las últimas décadas que ha sufrido la provincia de Castellón. En la tarde del lunes 15 de agosto un rayo originó las llamas que acabaron quemando casi 19.000 hectáreas de once términos municipales: Bejís, Torás, Sacañet, Teresa, El Toro, Jérica, Altura, Barracas y Viver en la provincia de Castellón, además de Alcublas y Andilla en Valencia.
Un fuego que quemó prácticamente toda la masa forestal de Bejís y Torás, los peores parados y que incluso amenazó las propiedades de los vecinos de Torás, aunque por fortuna el muro humano que construyeron los bomberos salvó las casas. Hubo 2.000 mil personas evacuadas y los 49 pasajeros de un tren quedaron atrapados por las llamas llegando a saltar a las vías y tratando de huir a pie. Algunos de ellos sufrieron heridas graves.
Color esperanza
Tres años después de aquel incendio, los pueblos del Palancia afectados empiezan a ver la luz, miran al futuro con la esperanza que ya se ha abierto hueco. Entre el negro que dejó la ceniza, las lluvias de este último año han posibilitado que crezca el verde y los vecinos, como los de Torás, van recuperando poco a poco la normalidad que se quebró aquel 15 de agosto de 2022.
En COPE explica el alcalde de Torás, Carlos Leoncio del Río, que "en primavera parecían campos de golf porque estaba todo verde. Gracias a Dios, la naturaleza es muy sabia y estamos viendo ya brotar pinitos que tienen 40-50 centímetros".
Celebra del Río que "la cosa va fuerte" en el sentido más positivo para su término municipal porque "está todo muy verde".
Todavía falta mucho por recuperarse pero ya es un gran paso que la vegetación haya regresado y los pinos hayan comenzado a crecer, aunque todavía por delante quedan muchos años para que la comarca del Alto Palancia vuelva a ser lo que era hace hoy tres años.
En aquel momento, Torás pensó que la zona "era irrecuperable", aunque pese a ello "seguimos luchando desde el minuto 1 para volverlo a ver verde". De hecho, en su caso particular, reflexiona que "cuando ves todo el pueblo abrasado, dices: ¿Yo qué hago aquí? yo me dejo esto de la alcaldía y me voy a casa. Después dije, cuando vuelva a ver todo verde ya me jubilo y estoy camino de la jubilación porque está todo muy verde".
Optimismo
Las perspectivas positivas que presenta la zona calcinada en 2022 ayudan al día a día de los vecinos que, cuando abren sus puertas o se asoman por las ventanas, ya no ven un paisaje negro y quemado.
"Un vecino me decía: Cada vez que salía de casa salía sin ilusión de verlo todo quemado y me amarga el día y ahora, salir de casa, aunque se han talado miles de árboles, ves verde el romero, el tomillo... y ver ese verde te alegra el día".
Los niños dan una lección
El espíritu infantil e inocente de los más pequeños ha ayudado a que los pueblos afectados por este incendio de Bejís salgan adelante, dando una auténtica lección. De hecho, son cientos los que están ayudando a la reforestación.
"Colegios, autobuses completos, niños con 3 y 4 años han venido a Torás. Pasamos las 3.000 visitas de chavales que han estado recogiendo suciedad como botes o botellas, incluso bicicletas o un coche. Y plantando y regando. Hemos tenido mucha ayuda de los pequeñajos y eso se agradece mucho".
Son niños que, además, han ayudado a que los municipios sean visitados y es que los fines de semana se desplazaban con sus padres para enseñarles la labor que habían hecho y los árboles que habían plantado.
"Ha sido ejemplar. hemos tenido uno o dos autobuses a la semana y ayuda mucho, pese a que por la sequía que hubo muchos árboles se murieron, pero da ánimo ver que la gente se preocupa por la naturaleza".