Veranear bajo vigilancia en Alicante: despliegue policial con drones para evitar robos en la costa

La Policía Nacional despliega un operativo especial en una de las zonas más turísticas del país

Drones en el cielo y patrullas sobre la arena: así se refuerza la vigilancia policial este verano en las playas de Benidorm

Isabel Bartolomé

Alicante - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Este verano, quien mire al cielo en las playas de Benidorm quizá no solo vea gaviotas o algún dron turístico. Desde hace días, varios dispositivos aéreos de la Policía Nacional sobrevuelan discretamente la costa para reforzar la seguridad en una de las zonas más turísticas y concurridas de todo el país.

Con la llegada de agosto y los días de máxima afluencia en los arenales, la Comisaría de Policía Nacional de Benidorm ha activado un dispositivo especial que combina drones, patrullas a pie y unidades móviles, en una estrategia conjunta para prevenir uno de los delitos más comunes en temporada alta: los hurtos. 

Tecnología en el aire, reacción en tierra  

La vigilancia aérea se realiza mediante drones operados por la Unidad de Medios Aéreos de la Policía Nacional de Alicante, que ofrecen imágenes en tiempo real a los equipos desplegados por tierra. Su objetivo no es solo vigilar desde una perspectiva elevada, sino detectar situaciones sospechosas, seguir movimientos inusuales y transmitir la información rápidamente a los agentes sobre el terreno.

En paralelo, las patrullas del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) y la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) recorren las playas y zonas colindantes, tanto a pie como en vehículos, con una presencia visible y permanente.

Esta coordinación entre medios técnicos y humanos permite actuar con rapidez ante cualquier incidente, lo que disuade a los posibles autores de robos, carteristas o ladrones de objetos personales. 

Un verano bajo vigilancia… y tranquilidad  

El despliegue tiene una función clara: reforzar la seguridad sin interferir en el disfrute del entorno. Según fuentes policiales, la presencia de drones no se percibe como invasiva y permite controlar amplias zonas con un solo operador.

Los delitos más habituales en esta época del año suelen ser robos en el interior de vehículos estacionados cerca de la playa, hurtos a bañistas que dejan sus pertenencias sin vigilancia o pequeños tirones en zonas de paso con gran concentración de personas. 

El papel del ciudadano: clave para una playa segura  

La Policía Nacional recuerda que la prevención también empieza por cada usuario. Por eso, desde el cuerpo insisten en mantener siempre vigiladas las pertenencias, no dejar objetos de valor visibles en los coches y, ante cualquier comportamiento sospechoso, avisar de inmediato al 091 o a los agentes presentes en la zona.

Además, la colaboración ciudadana ha sido fundamental en anteriores operativos similares, permitiendo en años anteriores la detención de varios individuos in fraganti gracias a los avisos rápidos de vecinos y turistas.

Seguridad como valor añadido en el destino  

El refuerzo policial en Benidorm no es casual: con más de 300.000 visitantes diarios en temporada alta, la ciudad es uno de los destinos turísticos más importantes de Europa. La seguridad ciudadana se convierte en un elemento esencial para preservar la buena imagen del destino y garantizar que residentes y visitantes disfruten con tranquilidad.

Desde la Policía Nacional aseguran que este tipo de operativos se repetirán y reforzarán en función del flujo de visitantes y la evolución de la actividad delictiva, que por el momento permanece estable pero vigilada.