Compra marihuana “de mala calidad” y acaba detenido por apalear a su camello en Alicante

Lo que comenzó como una simple compraventa de marihuana en una plaza del barrio del Garbinet terminó con tres personas detenidas, una pelea a golpes y una investigación policial por tráfico de drogas y agresión.

Un hombre de 49 años, de nacionalidad española, fue arrestado por la Policía Nacional después de apalear al supuesto vendedor que le había entregado 50 gramos de marihuana de “mala calidad” y que se negó a devolverle los 50 euros que había pagado por ella.

Según ha podido saber COPE Alicante de fuentes cercanas al caso, los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado sábado al domingo, alrededor de la una y cuarto de la madrugada, en una plaza muy próxima al Hospital General Doctor Balmis.

El comprador, acompañado de dos amigos con los que presuntamente iba a consumir la sustancia, habría mantenido una discusión con el vendedor por el estado del producto. Cuando este se negó a reintegrarle el dinero, el cliente decidió “hacer justicia por su mano”, iniciando una agresión que sorprendió a una patrulla policial que pasaba en ese momento por la zona. 

“Tomarse la justicia por su mano”: el delito que se le imputa  

Los agentes observaron cómo el presunto comprador pateaba la cara del otro hombre, que cayó al suelo con heridas en la boca. Aunque la víctima rechazó atención sanitaria, los agentes intervinieron de inmediato y detuvieron al agresor, que cuenta con 30 antecedentes policiales por distintos delitos.

A este se le atribuye un delito de realización arbitraria del propio derecho con empleo de violencia, tipificado en el Código Penal español y que se aplica a quienes intentan resolver conflictos por la fuerza sin acudir a la justicia.

El supuesto vendedor, un ciudadano peruano de 53 años, relató en un primer momento a la Policía que había sido víctima de un robo, pero el testimonio de varios vecinos que presenciaron la escena desmintió esa versión y permitió reconstruir lo ocurrido: ambos hombres habían acordado la compraventa de 50 gramos de marihuana por 50 euros. 

Una bolsa verde, testigos y más droga en un árbol  

La investigación se complicó cuando apareció una tercera persona implicada: una mujer española nacida en Cuba, de 51 años, que acompañaba al presunto traficante. En un primer momento se ausentó del lugar durante la pelea, pero fue localizada minutos después por los agentes.

Durante el cacheo, la Policía encontró una bolsa verde con un agujero, rota y con restos de marihuana, que coincidía con la descrita por los testigos como la que el comprador había devuelto por considerarla defectuosa. Además, en una de las ramas de los árboles de la plaza se halló otra bolsa con dos envoltorios de marihuana preparados para su venta, lo que confirmó la existencia de un pequeño punto de distribución en la zona.

Los tres fueron detenidos y trasladados a dependencias policiales: el comprador por agresión y los otros dos por delitos de tráfico de estupefacientes.

El vendedor carecía de antecedentes, mientras que la mujer sumaba 14 reseñas policiales previas. 

Intervención rápida de la Policía Nacional  

La rápida actuación de la patrulla que pasaba por la plaza del Garbinet permitió evitar lesiones más graves. Los agentes separaron a los implicados, aseguraron la zona y procedieron a identificar a todos los presentes, incluido el grupo de amigos del comprador, que confirmaron los hechos.

Fuentes policiales subrayan que este tipo de situaciones no son habituales, aunque sí ponen de relieve la presencia de pequeños puntos de compraventa de droga en algunos espacios públicos, lo que refuerza la necesidad de mantener la vigilancia en horario nocturno en zonas residenciales próximas a grandes equipamientos, como el hospital Doctor Balmis. 

Pasan a disposición judicial  

Tras prestar declaración en comisaría, los tres detenidos han pasado a disposición del Juzgado de Guardia de Alicante, que se hará cargo de la investigación.

La Policía continúa instruyendo diligencias para determinar la procedencia del estupefaciente y si el punto de venta operaba de manera habitual en la zona.

El incidente, que podría haber pasado por una pelea más de madrugada, ha destapado un entramado menor de venta de drogas y ha dejado una imagen insólita: un comprador que, insatisfecho con la mercancía, decidió resolver la disputa a golpes.

Una escena tan insólita como real, que deja tras de sí tres arrestos y una bolsa verde como prueba principal.