Alerta en Alicante ante una próxima riada: miles de casas construidas sobre terreno inundable

Un estudio de la UA destapa el riesgo oculto bajo 9.000 viviendas

Construcciones irregulares y abandono agrícola: la “tormenta perfecta” en las partidas rurales de Alicante

Isabel Bartolomé

Alicante - Publicado el

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Un estudio elaborado por la Universidad de Alicante (UA) revela que una de cada cinco viviendas en las partidas rurales del municipio se encuentra en zonas con peligro de inundación. La investigación, dirigida por los docentes Pablo Giménez Font y Antonio Prieto Cerdán, ha identificado que alrededor del 20% de las 9.000 construcciones analizadas presentan una vulnerabilidad alta frente a riadas torrenciales. 

El trabajo, realizado por el investigador Carles Vaquer Pastor, combina datos del Catastro, el PATRICOVA, el Instituto Cartográfico Valenciano y el INE, junto a imágenes satelitales y entrevistas vecinales. Los resultados reflejan que muchas de las viviendas se encuentran en zonas deprimidas o próximas a ramblas, sin servicios básicos y con construcciones que no cumplen la normativa urbanística vigente.

Las partidas rurales de Alicante presentan un terreno formado por cañadas de fondo plano y suelos de margas impermeables, lo que dificulta la infiltración y favorece la escorrentía superficial. El abandono agrícola y la expansión irregular reciente agravan aún más el riesgo.

Uno de los puntos más críticos es Cañada del Fenollar, donde el 40% de las viviendas, urbanas y rústicas, están en peligro de inundación por la confluencia de la Rambla de l’Alabastre y la del Rambutxar.

“Es preocupante ver cómo las personas que viven en estas zonas no solo afrontan la inseguridad física, sino también la falta de apoyo en caso de necesidad”, señala Carles Vaquer.

La Asociación de Vecinos de la Cañada del Fenollar (AVCF) ha logrado que instituciones como la Guardia Civil (SEPRONA) y la Subdelegación del Gobierno reconozcan la gravedad del problema, y el Ayuntamiento ha anunciado medidas urgentes para mejorar la coordinación entre la Agencia Valenciana de Protección del Territorio, Urbanismo y la Guardia Civil.

Aun así, los vecinos denuncian la ausencia de responsables políticos y reclaman un mayor compromiso municipal, ante una situación que afecta directamente a la seguridad, la calidad de vida y el acceso a servicios esenciales.

Alertan de deficiencias en el ambulatorio y el colegio, problemas en la recogida de residuos y un aumento de la inseguridad en la zona.