¿Qué es un pirocúmulo?: La nube de fuego que ha alcanzado los 14 kilómetros de altura en la Segarra

La nube de cenizas y humo provocó vientos de 125 kilómetros por hora y cambios de dirección del incendio, que ocasionó la rápida expansión

Pirocúmulo

Mar Puerto

Barcelona - Publicado el

3 min lectura

El incendio de la Segarra, que ha provocado la muerte de dos personas y ha afectado al menos a 6.500 hectáreas, ha generado un pirocúmulo, una nube de cenizas y de humo de 14.000 metros. Se trata del más alto registrado en Catalunya desde que se tienen registros -hace cinco años- y que ha puesto en alerta a los bomberos.   

Cuando se declara un fuego, las diferentes circunstancias que existen en la zona, como la carga forestal y la temperatura, pueden hacer que la columna de humo rompa la primera capa de la atmósfera y esto genere un pirocúmulo que marca, en parte, el comportamiento del incendio.  

La dimensión del pirocúmulo de este incendio, con un "comportamiento extremadamente violento", provocó vientos de 125 kilómetros por hora, con direcciones erráticas que, incluso, "pusieron en riesgo la seguridad de los bomberos", según han explicado los Bomberos de la Generalitat.  

Incendio

El efecto chimenea del pirocúmulo ha "succionado a los bomberos hacia fuera" y ha propiciado al inicio a la rápida expansión del fuego, una "velocidad de propagación que ha superado la capacidad de extinción de los bomberos en algunos momentos". Así, la velocidad de propagación del fuego habría superado los 30 kilómetros por hora

La descarga de lluvia finalmente ayudó a acotar el perímetro del fuego y pasadas las once de la noche se pudo estabilizar. Los bomberos han trabajado durante la noche para asegurarse de que no había reproducciones este miércoles, día en el que aún se esperan temperaturas muy elevadas.  

UN INCENDIO DE SEXTA GENERACIÓN

Por lo tanto, la alta velocidad de propagación del fuego, sumado a la altura y la velocidad inédita del pirocúmulo son "comportamientos propios de un incendio de sexta generación"

Estos fuegos generan vientos en dirección invertida y puede aumentar tanto la rapidez con la que se propaga el fuego que éste puede actuar en la desbandada, creando nuevos focos. Son, en definitiva, incendios de alta intensidad, difíciles de predecir y controlar.

uN INCENDIO CON DOS VÍCTIMAS MORTALES

Dos personas han muerto este martes en el incendio de Torrefeta y Florejacs, en la Segarra. Las víctimas son dos campesinos muy conocidos en Agramunt -el propietario de una finca agrícola y un trabajador, vecinos de Renant-. Y el propietario habría intentado ir a rescatar al trabajador, que estaba en la explotación agraria y que se había visto afectado por el humo.  

El fuego quedó estabilizado poco después de las diez y media de la noche de ayer martes y ha afectado a una superficie de unas 6.500 hectáreas, según Bomberos de la Generalitat.  

El fuego ha podido estabilizarse gracias a la lluvia que ha caído durante la noche en todo el perímetro: 50 dotaciones de bomberos han continuado perimetrando el fuego y remojando la zona, aprovechando que las temperaturas habían bajado, ya que durante este miércoles también habrá temperaturas muy elevadas en la zona.  

Incendio

 Un junio con el doble de incendios que el año pasado

Según datos de los Bomberos, este pasado mes de junio ha habido 1.059 fuegos en Cataluña, más del doble que en junio del 2024, cuando se produjeron 464 incendios.  

La mitad de los fuegos habidos son de vegetación agrícola y forestal, teniendo en cuenta que venimos de una primavera muy lluviosa que no sólo llenó pantanos, sino también tiñó de verde unos bosques que arrastraban tres años de estrés hídrico por la sequía. Y la lluvia también ha hecho crecer el cereal después de años de malas cosechas.   

Pero llegó junio y, sobre todo la segunda quincena con el calor extremo en algunos casos y con temperaturas pasando de largo los 30 grados, incluso rozando los 40. Todo ese sotobosque, matorrales y arbustos que han crecido alimentados por la lluvia, ahora se han secado. Por lo que, si hay un fuego, todo este combustible arderá a gran velocidad. Y con el cereal ocurre lo mismo: se propaga rápido como la pólvora.  

Temas relacionados