Consejos para que las plantas sobrevivan al calor del verano

Para cuidar tus plantas en verano, asegúrate de regarlas en profundidad a primera hora de la mañana o al atardecer, evita la exposición directa al sol en las horas más calurosas y considera la ubicación de las plantas para protegerlas del calor y del aire acondicionado. 

Consejos para el riego:  

Riego en profundidad:

Evita regar superficialmente, ya que el agua se evapora rápidamente. Riega hasta que el agua salga por los agujeros de drenaje de la maceta. 

Horario de riego:

Riega a primera hora de la mañana o al atardecer para evitar la evaporación del agua y aprovechar mejor la humedad. 

Cantidad de agua:

Riega menos veces pero más a fondo. Evita el exceso de agua, ya que puede ahogar las raíces. 

Riego en función de la maceta:

Si las plantas están en macetas de barro, riégalas con más frecuencia porque retienen menos humedad. Si están en macetas de plástico, riégalas con menos frecuencia. 

Ubicación y protección:  

Evita la exposición directa al sol:

Protege las plantas de la luz solar directa, especialmente en las horas más calurosas del día, con sombrillas o velos blancos. 

Protege del aire acondicionado:

Si tienes aire acondicionado, asegúrate de no colocar las plantas directamente en la corriente de aire, ya que el aire frío y seco puede dañar las plantas. 

Humedad ambiental:

Aumenta la humedad ambiental cerca de las plantas con bandejas con agua y piedras, o utilizando humidificadores. 

Otros consejos:  

Abono:

Aporta nutrientes a tus plantas con abonos adecuados para la época estival. 

Limpieza:

Limpia las hojas de tus plantas con un paño húmedo para eliminar el polvo y mejorar la absorción de luz. 

Control de plagas:

Revisa tus plantas regularmente en busca de plagas y aplica tratamientos específicos si es necesario.