Un hombre muere de un tiro en la cabeza en el interior de un portal de la calle Consell de Cent de Barcelona
Los Mossos buscan al autor o autores de los hechos y de momento no se ha activado el dispositivo jaula
La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos han abierto una investigación para esclarecer los hechos
Barcelona - Publicado el - Actualizado
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Un hombre ha muerto a tiros este martes sobre las cuatro y media de la tarde en el interior del portal del número 200 de la calle Consell de Cent de Barcelona, según han explicado los Mossos d'Esquadra. Los hechos han tenido lugar en la manzana del distrito del Eixample delimitada por las calles Consell de Cent, Urgell y Villaroel.
Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona se han dirigido al lugar, ya las cinco y media de la tarde se esperaba que la comitiva judicial terminara sus actuaciones para hacer el levantamiento del cadáver. La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos han abierto una investigación para esclarecer los hechos y detener al autor de los disparos mortales.
La policía debe determinar si los disparos se han efectuado dentro del inmueble o fuera de la calle
Los cuerpos policiales buscan al autor o a los autores de los hechos, pero de momento no se ha activado el dispositivo jaula que acentúa la vigilancia en las salidas de la ciudad.
Se han activado efectivos de la división Arro y patrullas de paisano y de seguridad ciudadana. La tesis principal apunta a la muerte a tiros de la víctima y el cuerpo ha quedado dentro del portal. La policía debe determinar si los disparos se han efectuado dentro del inmueble o fuera de la calle.
un aumento constante de tiroteos y apuñalamientos
En los últimos años, Cataluña ha experimentado un preocupante incremento en los incidentes relacionados con armas blancas y de fuego, generando una creciente percepción de inseguridad entre la ciudadanía. Según datos de los Mossos d’Esquadra, en 2024 se registraron 2.498 incidentes con armas blancas entre enero y agosto, una cifra que casi iguala los 2.917 casos de todo 2023. Por otro lado, los tiroteos en la región aumentaron un 23% en 2024, con 69 enfrentamientos armados, muchos de ellos vinculados al narcotráfico. Estos sucesos han encendido las alarmas tanto en las autoridades como en la población, que percibe un deterioro en la seguridad en las calles, especialmente en áreas urbanas como Barcelona, Badalona, L’Hospitalet y Terrassa.
Un agente de los Mossos recoge indicios
Sucesos recientes que reflejan la gravedad del problema
Entre los incidentes más destacados de 2024 y principios de 2025, se encuentra un tiroteo en el barrio de La Mina (Sant Adrià de Besòs) en enero de 2025, donde se registraron más de 200 disparos en un enfrentamiento entre familias rivales, sin víctimas mortales pero con un impacto significativo en la percepción de seguridad. Otro caso relevante ocurrió en marzo de 2024 en Terrassa, con múltiples tiroteos en menos de 24 horas, uno de ellos relacionado con un ajuste de cuentas entre bandas dominicanas. En cuanto a las armas blancas, la Guardia Urbana de Barcelona detuvo a seis personas tras una pelea con cuchillos cerca de la discoteca Razzmatazz en octubre de 2024, dejando dos heridos graves. Además, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) atendió a 361 personas heridas por arma blanca en 2024, lo que refleja la magnitud de este tipo de violencia.
En lo que va de 2025, la tendencia no parece disminuir. Según publicaciones en X, en los primeros días de febrero se reportaron al menos cinco apuñalamientos en diferentes localidades, incluyendo un asesinato en Vilanova del Camí y otro en Badalona, donde una persona fue atacada con un hacha. Asimismo, en julio de 2025, se registraron peleas con machetes en Castelldefels y L’Hospitalet, además de tiroteos en bares de Barcelona y Girona.
Agentes de los Mossos recogen indicios del asesinato
Motivos detrás del aumento de la violencia
El incremento de estos incidentes está estrechamente ligado al narcotráfico, que se ha consolidado como el principal motor de la violencia armada en Cataluña. La región se ha convertido en un punto estratégico para el cultivo y distribución de marihuana, lo que ha atraído a grupos criminales que compiten por el control del mercado. Esta rivalidad ha disparado la demanda de armas de fuego, muchas de ellas ilegales, utilizadas para proteger plantaciones o ejecutar ajustes de cuentas. En 2024, los Mossos confiscaron 774 armas de fuego, un 16% menos que en 2023, pero la presencia de armas de guerra, como subfusiles, sigue siendo alarmante.
Por su parte, el uso de armas blancas ha crecido debido a su fácil acceso y bajo coste. Según expertos, una navaja puede comprarse online por menos de 10 euros, y su portación se ha “socializado” entre ciertos grupos, especialmente jóvenes, como parte de una “cultura de la navaja”. Este fenómeno se ve agravado en contextos de ocio nocturno y en zonas con alta afluencia turística, donde los robos con violencia y las reyertas son más frecuentes. El verano, con la llegada de millones de turistas, también contribuye a un aumento de los delitos, ya que estos atraen a delincuentes que buscan aprovecharse de la situación.
Percepción ciudadana y falta de seguridad
La escalada de violencia ha impactado profundamente en la percepción ciudadana. Encuestas municipales en Barcelona señalan que la inseguridad es el principal problema para los residentes, a pesar de que las estadísticas oficiales muestran una reducción en ciertos delitos como robos con violencia. Esta desconexión entre los datos y la percepción se debe, en parte, a la visibilidad de los incidentes violentos, como apuñalamientos en lugares concurridos o tiroteos en zonas residenciales. La ciudadanía ha modificado sus hábitos, evitando ciertas áreas urbanas por temor a ser víctimas colaterales.
Además, algunos sectores critican que las autoridades hayan minimizado estos incidentes para evitar alarmar a la población o dañar la imagen turística de Cataluña. Esta percepción de inseguridad se ve reforzada por la falta de sanciones efectivas: hasta mayo de 2024, el 81% de las actas por tenencia de armas blancas prescribieron sin multas, lo que ha generado una sensación de impunidad.
Respuesta de las autoridades y desafíos pendientes
El Govern y los Mossos d’Esquadra han implementado medidas para combatir este problema, como el plan de “tolerancia cero” contra las armas blancas, que incluye más controles en espacios públicos, transporte y zonas de ocio. La Guardia Urbana de Barcelona ha identificado 82 puntos conflictivos en la ciudad y ha intensificado los cacheos con detectores de metales. Sin embargo, los sindicatos policiales denuncian una falta de recursos y equipamiento adecuado para hacer frente a la delincuencia organizada.