El derbi de los 'casi' salvados y 'casi' campeones

El Espanyol tiene que sumar dos puntos en los tres partidos últimos de la Liga si no quiere depender de nadie más para salvar la categoría. Pero se podría librar de bajar sumando uno, o ninguno, y lo haría con suficiencia si gana hoy, y el domingo en Pamplona y el otro fin de semana a Las Palmas... ¿Se entiende? Ya no va más con las matemáticas, la pelota rueda en la ruleta y los blanquiazules tienen fichas en casi todas las casillas... En casi todas, ese es el problema, el “casi”. El mismo “casi” con el que tiene que convivir el Barcelona en su camino para conquistar la Liga, retardado ayer por un tal Jacobo Ramón .

El vestuario españolista aparenta tranquilidad con el siguiente argumentario, palmario, que emana desde las altas instancias. “¿Por qué tenemos que tragar con que el Leganés va a ganar a Las Palmas en su estadio y nosotros no vamos a poder hacerlo la semana siguiente en Cornellà-El Prat?”. Pues “también es verdad”, le dije yo, abrumado. El temor del 'soci' perico que deja a los niños en colegio a primera hora de la mañana pasa por calibrar el estado de nervios que pueden alcanzar los futbolistas de Manolo González si llegan a la jornada 38 con la obligación de sumar los tres puntos, habiendo encadenado hasta 5 derrotas en el tramo decisivo de la temporada. Los profesionales suelen ser más calmados en ese sentido. “Más presión que contra el Oviedo hace un año no vamos a tener”, apuntan desde dentro.

La combinación de resultados es infinita así que no vale la pena ir más allá. Sí que ha tenido la suerte Manolo de jugar el derbi decisivo con casi, otra vez casi, su equipo de gala. Porque la duda sobre el estado de Pol Lozano sigue presente. No pudo en Leganés por una molesta cicatriz en su recto anterior derecho, que lleva dándole problemas desde hace semanas. Se 4está haciendo lo imposible para que esté listo para disputar 45 minutos. El Espanyol es otro con él o sin él. El resto no debería entrañar demasiadas dudas, ya que parecen intocables Joan, Omar, Kumbulla, Cabrera, Romero, Urko, Expósito, Roca, Puado y Roberto.

El derbi se jugará en la grada también. El papel está todo agotado, no habrá ni camisetas ni simbología culer en Cornellà-El Prat, lo que no quiere decir que no haya barcelonistas que se embosquen entre los 34.000 que van a registrar la mejor entrada de la temporada.

Del árbitro (Soto Grado), del resultado final y la posible celebración, moderada o no, del supuesto campeón en casi de triunfo ya habrá tiempo de hablar. Por ahora, el gran clásico del fútbol catalán se vivirá desde primera hora de la tarde en Cornellà, con la vigilancia de forma masiva de una policía autonómica que este año sí parece haber hecho los deberes que no hizo hace dos años. Preparados, listo y Tiempo de Juego desde las 19:00 con la resolución de la jornada 37 de la Liga.