Cartón en el huerto: el truco natural para eliminar las malas hierbas

Una solución simple, ecológica y sorprendentemente eficaz: usar cartón para mantener la tierra limpia durante todo el año sin herbicidas.

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Cartón en el huerto: el truco natural para eliminar las malas hierbas

Caterina Ruiz Ponce

Barcelona - Publicado el

2 min lectura

En tiempos de creciente conciencia ambiental, las técnicas agrícolas tradicionales y sostenibles vuelven a cobrar protagonismo. Una de ellas es el uso del cartón como barrera natural contra las malas hierbas. Fácil, económica y accesible, esta estrategia permite cuidar el huerto sin esfuerzo constante ni productos químicos.

El método consiste en cubrir la tierra con cartón marrón (sin tintas ni plásticos) y añadir encima una capa de material orgánico como paja, hojas secas o compost. Esta cubierta bloquea la luz, lo que impide que germinen las malas hierbas. Al mismo tiempo, el cartón se descompone y enriquece el suelo.

El cartón actúa como barrera física y conservador de humedad, lo que reduce la necesidad de riego. Al descomponerse, libera carbono y alimenta la vida microbiana del suelo, mejorando su estructura y fertilidad.

Consejos según la estación:

En primavera, se recomienda aplicar el cartón al preparar los bancales, dejando huecos donde irán las plántulas. Esto evita que las malas hierbas compitan con los cultivos jóvenes.

Durante el verano, el cartón actúa como un excelente aislante térmico, protegiendo el suelo del calor extremo y minimizando la evaporación del agua.

En otoño, es ideal para cubrir áreas que no se cultivarán, favoreciendo que el cartón se degrade lentamente con la humedad y aporte nutrientes para la próxima temporada.

En invierno, incluso con bajas temperaturas, ayuda a evitar la erosión causada por lluvias intensas y protege el terreno en reposo.

Este sistema es compatible con la agricultura regenerativa y la permacultura, y también se aplica en jardines urbanos, terrazas y patios. Incluso en macetas grandes, el cartón se convierte en una herramienta efectiva y ecológica.

Es importante no cubrir directamente el tallo de las plantas para evitar hongos o pudrición, y vigilar que no se convierta en refugio para babosas o caracoles.

Así, lo que antes era un residuo —como cajas de cartón de envíos— hoy puede transformarse en una solución práctica y natural.

El cartón, tan común y poco valorado, se convierte en un aliado clave contra las malas hierbas, permitiendo un cultivo más limpio, natural y respetuoso con el medio ambiente, en cualquier estación del año.