La completa falta de voluntad política por parte de los ayuntamientos, como el de Barcelona, ante el fenómeno del 'top manta' -la venda ilegal de productos falsificados por parte de personas en situación irregular- ha provocado, según ANDEMA (Asociación Nacional parar la Defensa de la Marca) la pérdida de los ciudadanos del espacio público. Esta asociación considera que antes de sensibilizar al público o de aumentar la presencia policial "primero ha de existir una disposición de los consistorios para actuar". Actuar delante de un problema que pasa factura al sector téxtil y a nivel laboral, donde ANDEMA calcula que se han perdido 68.000 puestos. El presidente de esta organización, José Antonio Moreno, afirma que en Barcelona esta disposición no existe; que el gobierno de Colau "ha mirado hacía otro lado", omitiendo actuar, convirtiendo este fenómeno en un tema social. 

La consecuencia práctica es que los manteros se han apropiado del espacio público, según Moreno, ocupando sitios tan emblemáticos como Plaça Catalunya, Las Ramblas o la avenida Juan de Borbón, llegando a poner la mantas también en el subsuelo, dentro de estaciones de metro i tren. En este sentido, Moreno, cree que Francia es la referencia en cuanto a legislación contra las falsificaciones o para proteger la propiedad intelectual y industrial. Allí, dice, que no solamente hay más sensibilización social a todos los niveles -políticos, consumidores, jueces, medios de comunicación,etc- , sino que se castiga y se multa a los que compran productos falsificados.

Desde ANDEMA han hecho estas declaraciones después de una operación conjunta, esta semana, de Mossos d'Esquadra, Guàrdia Urbana i Policial Portuaria, que ha permitido decomisar más de tres mil productos destinados a la venta ambulante. Operación que se ha producido pocos días después del inicio de la campaña comercial de Navidad.