La hostelería sigue enfrentándose a grandes desafíos. Tras superar el impacto de la pandemia, el sector se prepara para la campaña de verano con un preocupante aumento del déficit de profesionales. Algunos establecimientos han tenido que optar por reducir horarios para acomodarlo a la plantilla. Hacen falta trabajadores para la hostelería, para todas las categorías y todos los puestos, pero la concesión de subsidios disuade a la hora de aceptar estos contratos de trabajo. Jaime Fernández, presidente de la patronal de la hostelería ha explicado a COPE que por 200 euros de diferencia, muchos optan por “quedarse en casa. Es un factor importante que nos está afectando”.

Ya en Semana Santa muchos establecimientos se vieron obligados a cerrar antes de tiempo y no atender cenas más allá de las diez de la noche. Una práctica que se podría extender si no se cubren todos los puestos vacantes. “Ésa va a ser la línea, hay que reducir y si hay que cerrar antes, pues habrá que hacerlo”, comenta.

Una realidad a la que se enfrenta Alberto Lázaro, propietario de Los Ilustres. Nos cuenta que tienen ofertas de trabajo para cocina, sala, limpieza, sumiller...pero no consiguen formalizar los contratos. Los horarios son el principal hándicap al que se enfrentan, no así los sueldos que se ofrecen. “Tenemos todo tipo de puestos de trabajo y en todos tenemos problemas para conseguir personal”, explica. “Si hay menos personal en un turno y se te llena el local, vas a atender mal, seguro”, comenta.

El problema de contratación de personal es una de las principales preocupaciones de unos empresarios que siguen apostando por la calidad del servicio.