La falta de sucursales de bancarias ha llevado a muchos pueblos a la pérdida de población y ha llevado a los vecinos a trasladarse para realizar gestiones como sacar dinero.

El 82% de los pueblos de Salamanca no dispone de oficina bancaria. Esta brecha entre el mundo rural y el mundo urbano se acrecienta en los pequeños pueblos ya que la mayoría de población es mayor. La iniciativa pretende llevar 2 cajeros automáticos en los bibliobuses a 129 pueblos una vez al mes.

Según el presidente de la institución provincial, Javier Iglesias, se trata de un proyecto "pionero" que nace con el propósito de poder ampliarse, ya que 296 de los 362 municipios de la provincia no cuentan con cajero.

Así, con un coste anual de unos 18.000 euros por ambos cajeros, la idea es "reducir la brecha" en este servicio, que ha aumentado su deficiencia en los últimos años por el cierre de oficinas y que permite sacar dinero en efectivo a los vecinos sin tener que desplazarse a localidades más lejanas.

"Se trata de un servicio básico, necesario y muy demandado, por lo que la Diputación ha decidido aportar una solución imaginativa y de bajo coste, con la que se solucionaría esta carencia en 129 municipios", ha apuntado el presidente.

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Los cajeros contarán con cámaras de videovigilancia, 5G y estarán adaptados para personas con discapacidad. Así darán un servicio que llevará una empresa especializada; en cuanto a la comisión por retirada de efectivo, Iglesias ha explicado que será de 1,30 euros, pues es la que obliga la ley, y que los beneficios redundarán en mejoras como el de los bibliobuses, en los que estarán ubicados estos nuevos servicios que recorrerán la provincia sobre ruedas.

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El proyecto comenzará en los próximos días y en el próximo trimestre llegará a los primeros pueblos. Desde la diputación, esperan disponer de un tercer autobús para poder llegar a más de 200 municipios. Con esta iniciativa se espera fijar población y nace de una petición conjunta de los ayuntamientos de la provincia.