La portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Burgos, Nuria Barrio, aseguró hoy en la capital burgalesa que consideran que se deberían adoptar “medidas más restrictivas” en todo el país para frenar el avance la pandemia del COVID-19, asegurando que tanto el alcalde como el equipo de Gobierno son partidarios de que se implante un toque de queda.

Durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno, Barrio explicó que aunque las nuevas medidas dispuestas en el municipio tras la implantación del confinamiento perimetral, adelantan el horario de cierre de los comercios y la hostelería, los focos se registran en su mayoría en reuniones familiares o sociales, por lo que, tal y como señaló también ayer el alcalde de la ciudad, creen que se deberían adoptar otro tipo de medidas “más severas” como el toque de queda. Asimismo explicó que en su opinión se trata de una medida que se tendría que valorar y aplicar.

Retenciones

Por otro lado, a preguntas de los medios acerca de la situación producida ayer durante le primer día de confinamiento perimetral, y en referencia a las retenciones que se produjeron en las entradas y salidas de la ciudad debido a los controles policiales, la portavoz pidió disculpas a los ciudadanos por los problemas ocasionados.

Además indicó que durante el día de hoy no se habían producido retenciones ni atascos, debido a que los operativos se han ido ajustando para evitar que se repita esta situación. “Lo lamentamos y pedimos disculpas”, dijo, recordando que durante los próximos días y hasta que finalice el confinamiento, los operativos policiales irán rotando.

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