Villel de Mesa sigue reparando daños ocho meses después de la DANA

El alcalde denuncia que las ayudas públicas avanzan, pero los seguros no cubren ni la mitad y la Confederación ni está ni se la espera

Nacho Rodríguez de Tapia

Guadalajara - Publicado el

2 min lectura

 En Villel de Mesa, el agua anegó el pueblo entero. Hasta un metro veinte en la plaza dejó el desbordamiento del río, dejando el municipio completamente incomunicado durante días. Desde entonces, ha tocado llamar a los seguros, achicar agua y tratar de volver poco a poco a la normalidad. Pero el trabajo no ha terminado. La farmacia, el bar y la biblioteca siguen con arreglos pendientes.  “Hay humedades, sobre todo en la farmacia y en la biblioteca. Plastificar y pintar aún no se puede hacer, tiene que secar todavía”, explica Pedro Lozano, alcalde de Villel.

El bar pudo abrir de nuevo en Semana Santa gracias a una subvención de la Junta, que permitió reformarlo casi por completo. Mientras, las ayudas públicas van llegando, pero los seguros no están cumpliendo las expectativas. “Nosotros teníamos una valoración de 80.000 euros en daños. El Consorcio valoró 40.000 y nos han ingresado 19.000. Ha habido muchos más daños. Hemos hecho hincapié en que es imposible que sea solo ese dinero”, critica Lozano. 

La Subdelegación del Gobierno en Guadalajara ha dado luz verde a 78 proyectos

El pueblo va recuperando su ritmo, aunque las ayudas de la Subdelegación del Gobierno aún no han llegado. Ocho meses después, desde los ayuntamientos hay paciencia, pero también resignación“Es mucho lo que hubo y hoy Villel está haciendo todo y arreglando el daño que hubo, con la Junta y la Diputación. Lo único que quiero que quede claro es que la Confederación no está haciendo nada”, apunta el alcalde.

Lo más grave, sin embargo, sigue siendo la agricultura. Los campos siguen destrozados y las cosechas se han perdido.  “Confederación hasta ahora no ha hecho nada. Nosotros tenemos muchísimo daño en la agricultura. Este año no hemos podido sembrar. Son dos cosechas perdidas. Hay daños de más de 40 o 50 mil kilos de grano”, denuncia. Eso equivale, calcula, a unos 20.000 euros de pérdidas directas, sin contar lo que costará arreglar las fincas, que puede suponer otros 15.000 o 20.000 euros más.

Y el temor, claro, sigue muy presente. “Están viniendo los guardas, que hacen lo que pueden, mandando todos los informes a Confederación. Pero, aunque no hubiesen hecho la limpieza de fondos y orillas, los puntos críticos se podían haber tocado. Y no han hecho nada”, sentencia Pedro Lozano.