Estás de vacaciones, pero no desconectas: El alarmante dato que preocupa a los psicólogos
El 88% de los trabajadores sigue conectado al trabajo en vacaciones: correos, llamadas y mensajes convierten el verano en todo menos un descanso real
Santander - Publicado el
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¿Te imaginas estar de vacaciones y no poder apartar el móvil del bolsillo? Para la mayoría de los trabajadores en España, esto no es imaginación, sino realidad. Un 88% afirma no lograr desconectar del trabajo durante su periodo vacacional, según distintos estudios, y los datos reflejan que la hiperconexión está afectando cada vez más a la salud mental. La cultura de la disponibilidad permanente. Y es que la adicción al trabajo no se toma vacaciones y las cifras sorprenden, 8 de cada 10 trabajadores siguen conectados.
La psicóloga Isabel Diego, profesora y experta en psicología sanitaria y forense, explica en Herrera en COPE, que la raíz de este fenómeno se encuentra en lo que se denomina “cultura de la hiperdisponibilidad”. “Seguimos arraigados a la idea de que, si no estamos disponibles, alguien podría emitir un juicio negativo sobre nosotros”, señala Diego. Esta sensación genera una especie de presión invisible: aunque estemos de vacaciones, seguimos pendientes de correos, llamadas y mensajes de trabajo.
El problema no es solo anecdótico: los directivos, autónomos y mandos intermedios son los más afectados, con cifras que superan el 70% de personas que no logran desconectar. “Si no llevamos a cabo conductas vinculadas a las vacaciones, nuestra mente sigue activando preocupaciones y rumiaciones relacionadas con el trabajo”, añade la vocal del Colegio de Psicología de Cantabria.
Consejos para desconectar de verdad
A pesar de la presión, Diego ofrece estrategias prácticas para romper con este hábito dañino:
1-Establecer momentos concretos: Si necesitas revisar el correo o atender alguna llamada, hazlo siempre a una hora determinada, ni más ni menos, evitando la revisión continua.
2-Vacaciones sin tecnología: Dedicar periodos sin dispositivos es saludable. La desconexión digital ayuda a la mente a recuperarse y a disfrutar del tiempo libre.
3-Normalizar la desconexión: Recordar que todos los compañeros también están de vacaciones, y "no pasa nada", puede aliviar la sensación de urgencia y culpa.
El coste invisible de no desconectar
Jóvenes mirando teléfono móvil
Los efectos de la hiperconexión son claros: el 42% de los trabajadores afirma haber sufrido problemas de salud mental relacionados con la saturación digital, frente al 27% registrado hace apenas cuatro años. La presión constante aumenta la ansiedad, el estrés y la sensación de agotamiento, convirtiéndose en un problema que va más allá del descanso físico.
Además, la desconexión no solo beneficia a la salud, sino también al rendimiento laboral: los profesionales que logran separar trabajo y tiempo libre son más productivos, creativos y comprometidos con sus empresas. Por eso, cada vez más compañías buscan implementar medidas de respeto al descanso, desde limitar comunicaciones fuera de horario hasta programas de bienestar integral.
En definitiva, desconectar de verdad es un derecho, una necesidad y una competencia estratégica. Este verano, apagar el móvil puede ser más que un capricho: puede ser la clave para cuidar la mente, el cuerpo… y volver al trabajo con energía renovada. “Dar valor a nuestro silencio nos hace más profesionales; desconectar, no es ausencia, es cuidar la calidad de nuestra presencia”, aseguran los expertos.