El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez ha mostrado su enfado con el Gobierno de España por la próxima apertura del antiguo acuartelamiento de Las Raíces, en La Laguna, para habilitarlo como campamento provisional de inmigrantes, unas instalaciones que califica como "campo de refugiados". "Esto no resuelve el problema de la migración en Canarias, al contrario, ahonda en el problema", ha asegurado, recordando que "la única solución que eiste realmente es la repatriación en la medida que sea posible o, si no, la derivación a la Península".

El próximo miércoles está previsto una reunión telemática del presidente del Cabildo de Tenerife con los alcaldes del Área Metropolitana y la presidenta de la Federacion Canaria de Municipios. El alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, ha solicitado al Ministerio de Inclusión, Seguidad Social y Migraciones, que esté presente. Para su homólogo chicharrero, "abrir recursos aquí de manera indefinida es condenar a Canarias a que este problema lo tengamos que resolver solos, sin posibilidad de dar un alojamiento ni de integración a unas personas que van a estar deambulando por las calles de La Laguna, de Santa Cruz y de El Rosario sin rumbo y sin ningún tipo de apoyo para iniciar una vida mejor".

Bermúdez ha lamentado la apertura de centros temporales con más de 2.000 plazas en Tenerife "mientras que en la Península hay recursos que están ociosos y que podrían albergarlos". Por eso, asegura que "el abandono que el Gobierno de España tiene hacia Canarias es inaceptable y cualquier gobierno que tuviera la más mínima decencia intentaría resolver este problema derivando los migrantes al resto de Europa".

Luis Yeray Gutiérrez, por su parte, ha destacado que "ante una crisis humanitaria que afecta a toda Canarias" es necesario que todas las administraciones se impliquen de manera responsable y trabajen de forma conjunta para garantizar que la acogida a estas personas se realiza con todas las garantías y en las mejores condiciones posibles.