La dirección de Saint Gobain y los sindicatos empiezan a negociar el ERE para la planta de Avilés
Ambas partes se han emplazado a configurar las mesas de negociación. El comité de empresa confía en minimizar la pérdida de empleos

Aitor Ruíz del comité de empresa reconoce que la situación es complicada
Madrid - Publicado el - Actualizado
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"La situación es complicada, aunque las fábricas quien las hace rentables es la propia empresa, y para que sean rentables las plantas de Avilés y de Arbós nos hace falta carga de trabajo", son declaraciones de Aitor Ruíz, miembro del comité de empresa de Saint Gobain, quien reconoce que "el mercado del automóvil está cambiando, aunque la compañía no ha calculado bien la producción, porque se ha fabricado más de lo que se necesitaba". El comité de empresa de la multinacional francesa en España se ha reunido en la tarde de este jueves con la dirección de la compañía. Una primera toma de contacto de la que poco ha salido, más allá del compromiso de configurar las mesas de cara a la negociación. Los plazos que manejan ambas partes es de cinco días para configurar la mesa que debe de negociar el ERTE y de siete días para la que debe de negociar el ERE. Paralelamente, el comité de empresa está a la espera de ver los datos que la compañía pone encima de la mesa para trasladar a los centros de trabajo en Asturias y Tarragona. Desde el comité de empresa, aún reconociendo la difícil de la situación, confían en minimizar el impacto laboral todo lo posible.
Saint-Gobain anunciaba un ERE para la división de Sekurit que afectaría a 40 trabajadores en la planta de Avilés, y un ERTE de doce días para el resto de la plantilla durante el mes de junio. Planes que también afectarían a la planta que la empresa tiene en Tarragona.
Desde el Principado, el consejero de Industria, Enrique Fernández, anima a las dos partes a que inicien este diálogo con el objetivo de que el impacto sea el menor posible, y que empresa y sindicatos tomen las decisiones adecuadas para garantizar la producción en Asturias. Enrique Fernández reconoce, no obstante, que la circunstancias de los mecados son muy complejas, y seguramente estas decisiones están siendo muy difíciles.