El Sporting respira gracias a una victoria agónica en Elda
Los rojiblancos se impusieron al Eldense después de un ejercicio de resistencia a los múltiples centros laterales del conjunto local
Los jugadores del Sporting celebrando uno de los dos goles ante el Eldense
Asturias - Publicado el - Actualizado
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El Sporting consiguió una victoria clave. En un partido trepidante en el que los rojiblancos tuvieron eficacia y supieron sufrir el empuje del Eldense, que bombardeó el área de Yáñez durante todo el encuentro. Había expectación por ver el primer once de Garitano y vino con novedades importantes. La disposición fue la de un 4-2-3-1 reconocible, con Gelabert en el enganche. Y con retoques en la defensa. Kevin Vázquez sentó a Guille Rosas y Maras desplazó a Diego Sánchez al lateral dejando fuera a Pablo García.
El partido emanaba tensión desde los primeros minutos. No había un dueño claro y cada equipo rondaba el área rival por fases. El Sporting con Nico Serrano y Gelabert intentando conectar y el Eldense con chispazos a balón parado de Marc Mateu. El acercamiento más peligroso fue el que acabó en gol rojiblanco. Una combinación de fantasía y calidad entre Dubasin y Gelabert acabó con un toque sutil de Gelabert al fondo de las mallas. En los últimos minutos de la primera mitad en Eldense apretó, pero el Sporting se defendió bien.
SEGUNDA PARTE
Y apretando empezó el Eldense también en la segunda parte. Con varios córners seguidos botados con mucho peligro por Marc Mateu. En uno de ellos tuvo que aparecer providencial Kevin Vázquez para evitar el gol local. Y cuando más estaba sufriendo el Sporting, consiguió ampliar ventaja. En una contra, Dubasin fue claramente derribado por Dani Martín. Aunque hubo que acudir al VAR. El propio Dubasin anotó.
Al Eldense no le quedó otra que seguir apretando y lo hizo colgando balones al área, como llevaba gran parte del partido. Incomprensiblemente, Fede Vico metió la mano cuando el balón iba dentro y eso salvó al Sporting. En otro más de Mateu desde la izquierda, el Eldense marcó y añadió una agonía extrema a los últimos minutos de partido. Juanto Ortuño remató al poste y anotó su propio rechace. Lo que dejó unos minutos finales de sufrimiento y de constantes despejes a los centros locales. Los despejes y el paradón de Rubén Yáñez a un remate de Ropero en el 89. Un Rubén Yáñez que también se hizo grande para reinar por arriba. Y con ese sufrimiento, no podía llegar de otra manera, la victoria que saca al Sporting de la mala racha y que le permite coger algo de aire en un partido tenso como pocos.