La derrota en Anoeta deja tocados a la SD Huesca y a Guilló
Análisis de la situación del equipo en Deportes Cope con Miguel Barluenga, Raúl Ferrer, Eloy Navas y Pablo Barrantes
Jaca - Publicado el - Actualizado
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La SD Huesca de Sergi Guilló atraviesa el momento más delicado de la temporada. La derrota del miércoles en el partido aplazado con la Real Sociedad B (2-0) mostró la cara más vulnerable de un equipo en caída libre. Solo ha sumado cuatro de los últimos 21 puntos en juego y la secuencia de las cinco derrotas consecutivas fuera de casa la acerca a los puestos de descenso. A dos puntos de la zona roja, se desangra en las dos áreas: los recurrentes errores defensivos y la falta de pegada asoman al proyecto a una doble reválida en las próxima jornadas ante Andorra y Real Zaragoza.
Las dudas se ciernen sobre el joven técnico ilicitano, autocrítico después de caer en Anoeta. La gestión de los recursos y los continuos vaivenes en las alineaciones, impiden que los hallazgos, con notables minutos de juego ante Cádiz, Las Palmas o Albacete, se aposenten y traduzcan en mejores resultados. Aunque ha encontrado un patrón de juego con el cambio de esquema a la defensa de cuatro, los resultados más recientes ponen en entredicho la labor de Guilló. El club traslada su “preocupación” por la inercia del equipo, y el partido con el Andorra puede ser decisivo para la suerte del entrenador.
Las doce jornadas que han transcurrido presentan dos caras radicalmente distintas y un deterioro evidente. Los oscenses sumaron diez puntos en las cinco primeras, el mejor arranque en el fútbol profesional si se toma ese periodo de tiempo; en las siete posteriores solo han recogido cuatro, los que brindaron en El Alcoraz la victoria ante el Burgos gracias a un gol de Ntamack en el último suspiro (2-1) y el empate con la UD Las Palmas (1-1). Mientras, se ha desangrado a domicilio con las derrotas en Ceuta (2-1), La Coruña (4-0), Cádiz (1-0), Albacete (2-1) y Real Sociedad B. En su estadio también cayó con el Granada (0-1) hasta perder la mitad de los 12 encuentros disputados.
El balance de goles a favor y en contra de este tramo es desalentador. En estos siete compromisos se han anotado cuatro tantos y se han encajado 12. El triple. En una hipotética clasificación desde la jornada 6, la SD Huesca es el tercer peor equipo de la categoría, solo por delante de Real Zaragoza y Mirandés. Un deterioro que alcanzó en Anoeta su máximo exponente. Los de Sergi Guilló se descompusieron a partir de una mala acción defensiva que derivó en el penalti por mano de Julio Alonso. Lejos de corregirse una tendencia detectada y expuesta por el entrenador de manera recurrente, se repiten situaciones en un contexto en el que los detalles definen partidos.