Desarticulado un grupo criminal especializado en el robo de cobre en Andalucía y Extremadura
Han sido detenidas 23 personas y otras 5 están siendo investigadas por delitos de robos con fuerza y receptación. Se han incautado de 21 toneladas de materiales sustraídos. La operación lleva en curso desde mayo de 2024
Sevilla - Publicado el - Actualizado
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La Guardia Civil desarticula un grupo especializado en el robo de cobre en plantas solares en Andalucía y Extremadura. En el marco de la operación “KUPFER”, iniciada en mayo de 2024, han sido detenidas 23 personas y otras 5 están siendo investigadas por delitos de robos con fuerza y receptación. Además, se han esclarecido 21 toneladas de materiales sustraídos.
La investigación comenzó tras detectarse un notable incremento en los robos de cobre y bobinas en plantas fotovoltaicas, tanto en funcionamiento como en construcción, especialmente en la zona de Carmona. El grupo criminal, altamente organizado, aprovechaba el auge de estas instalaciones en la región de alto valor en el mercado. Según las pesquisas, el material robado era vendido en chatarrerías locales a precio de mercado, desde donde se reintroducía en el circuito legal.
Las detenciones se han llevado a cabo en las provincias de Sevilla y Badajoz, e involucran a un variado perfil de implicados: desde recolectores de chatarra hasta trabajadores de las propias plantas solares y personas vinculadas a empresas de seguridad privada. Este entramado facilitaba tanto la ejecución de los robos como la posterior comercialización del material.
En total, se han realizado 27 inspecciones en chatarrerías de ambas regiones, lo que ha permitido intervenir 7 toneladas de cobre y 14 toneladas de otros materiales relacionados con las instalaciones solares. La operación ha sido coordinada por el equipo ROCA y el Área de Investigación del Puesto Principal de Carmona, con el apoyo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Sevilla, el SEPRONA de Sevilla y Badajoz, y la Unidad de Helicópteros de Sevilla.
Los detenidos, junto con las diligencias correspondientes, han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial. Con esta actuación, la Guardia Civil pone fin a las actividades de una red que había convertido el robo de cobre en plantas fotovoltaicas en una lucrativa fuente de ingresos, afectando a un sector en pleno crecimiento en el suroeste español.