El servicio que un joven policía del cuerpo de agentes locales de Castilleja de la Cuestatuvo que realizar hace unos días fue algo distinto a lo habitual. No consistió en poner multas de aparcamiento, ni disolver botellonas o sancionar por incumplimiento de las normas anti covid.

La suya fue una tarea más humana y de acompañamiento a un anciano que se encontraba en el pueblo completamente desorientado. Fueron los vecinos los que se percataron de la situación y dieron aviso a la policía para que pudiera buscar una solución.

La llamada se produjo a última hora del turno policial de la mañana en Castilleja de la Cuesta la pasada semana. La Policía recibió entonces el aviso. Los vecinos hablaban de un un anciano desorientado que se encontraba en un bar de esta localidad sevillana.

---

?? Con esta foto de un servicio realizado la semana pasada, arrancamos este #lunes dando la enhorabuena a la @PoliciaLocalcc por su labor con l@s vecin@s que más lo necesitan.
??Tu Policía siempre cerca
??C/Octavio Paz
??954164151#PolicíaCastilleja#TuAyuntamientoATuServiciohttps://t.co/tgxNmyWg84

— Ayuntamiento de Castilleja (@CastillejaCta) April 26, 2021

---

• Left6:No existe configuración de publicidad para el slot solicitado

Al llegar los agentes lo encontraron nervioso y decidieron sacarlo del establecimiento. De esa forma buscaban que estuviera algo más tranquilo mientras trataban de localizar a sus familiares y pedían servicios médicos para el anciano.

Mientras eso ocurría el joven agente se sentó en el bordillo junto a la silla donde se encontraba el hombre que pudo contarle que había llegado en autobús , se había bajado en una parada pero no sabía dónde estaba.

El anciano, ya más tranquilo tras la conversación con el agente no sufrió daño alguno. Su hija apareció poco después y pudo recogerlo sano y salvo en la jefatura de Policía.