¿Tarjeta o efectivo? Descubre la forma más segura y cómoda de pagar este verano

Descubre cuándo conviene más usar tu tarjeta y cuándo llevar efectivo para tus vacaciones

¿Tarjeta o efectivo? Descubre la forma más segura y cómoda de pagar este verano

Ángel López

Jaén - Publicado el

3 min lectura

Cuando llega el verano y empiezas a planear tus vacaciones, una de las dudas que más surge es cómo llevar el dinero. ¿Es mejor pagar con tarjeta o en efectivo? Aunque no hay una respuesta única para todos, conocer los pros y contras de cada opción te ayudará a disfrutar más y a evitar complicaciones.

Pagar con tarjeta es, sin duda, la opción más cómoda para muchos viajeros. Permite hacer pagos rápidos, no tienes que preocuparte por llevar mucho dinero encima y puedes consultar tus movimientos al instante desde la app del banco. Además,  algunas tarjetas incluyen seguros de viaje, protección contra fraudes y programas de puntos o descuentos que pueden darte beneficios adicionales o incluso sacarte de un apuro si surge un imprevisto.  

Sin embargo, no todas las tarjetas son iguales. Algunas cobran comisiones por uso en el extranjero, además de un recargo por conversión de moneda, lo que puede encarecer tus compras sin que te des cuenta. Por eso, antes de salir, revisa bien las condiciones de tu tarjeta y valora solicitar una pensada para viajar, que no cobre comisiones o que las reduzca al mínimo. Existen también tarjetas virtuales que puedes recargar y que te ofrecen mayor seguridad al pagar por internet o en establecimientos desconocidos.

Pagar con tarjeta es, sin duda, la opción más cómoda para muchos viajeros

También es fundamental avisar a tu banco sobre las fechas y destinos de tu viaje para evitar que bloqueen tu tarjeta por actividad sospechosa. Este paso es muy sencillo y puede evitarte muchos dolores de cabeza. Lo mismo ocurre con el límite de crédito: asegúrate de que sea suficiente para los gastos estimados del viaje, sobre todo si piensas hacer pagos importantes como alquiler de coche o reservas de hotel.

Por otro lado, el efectivo sigue siendo imprescindible en muchas situaciones. En mercados, pequeñas tiendas, bares o en zonas rurales, es frecuente que no acepten tarjeta o que el datáfono no funcione. Por eso, es recomendable llevar una cantidad prudente de dinero en efectivo, que puedas controlar sin riesgo. Además, cambiar dinero en tu país o en lugares oficiales suele ser más barato que hacerlo en destino, donde las comisiones pueden ser elevadas.

La mejor estrategia para el verano es combinar ambas formas de pago. Usa la tarjeta para gastos grandes o pagos seguros, y el efectivo para pequeños gastos, propinas o compras en sitios donde no se acepta tarjeta. Esto te da flexibilidad y seguridad para cualquier situación.

Un consejo práctico es llevar más de una tarjeta, por si pierdes una o te la bloquean, y siempre tener a mano los números de contacto del banco para actuar rápido en caso de robo o pérdida. También es útil guardar copias digitales de tus tarjetas y documentos importantes.

El efectivo sigue siendo imprescindible en muchas situaciones. En mercados, pequeñas tiendas, bares o en zonas rurales, es frecuente que no acepten tarjeta

Finalmente, no olvides ser prudente con el uso de la tarjeta en sitios poco fiables y controlar tus gastos para evitar sorpresas en la factura al final del mes.

Así, con un poco de planificación, tu verano será mucho más tranquilo y lo único que tendrás que preocuparte es por disfrutar del sol, la playa y esas experiencias que hacen que valga la pena cada viaje.