La subida de la luz será un quebradero de cabeza para muchas familias que, tras los consejos del gobierno, ya están pensando en hacer los malabares para ahorrar en el consumo de la electricidad.

Entre los consejos se encuentran los diferentes tramos horarios para labores cotidianas como poner una lavadora o cocinar con los electrodomésticos a pleno rendimiento pero, ¿cómo se las ingeniarán los bares y restaurantes para intentar no notar esta subida?

Antonio Torres, representante de BARECA, asegura a COPE Huelva que esta medida "es otro palito más a la hostelería que, si ya de por sí ha sufrido por la dureza fiscal de estos meses de pandemia, esto es otro añadido más a la economía empresarial", asegura.

"Es cierto que hemos visto paliado una parte de los problemas con los ERTEs y los veladores en ciertos municipios de la provincia de Huelva, pero no hemos obtenido ninguna ayuda fiscal relativo a otras cuestiones que, con ningún tipo de ingreso hemos tenido que seguir haciendo frente", afirma Torres sobre la dificultad que ha supuesto llegar hasta este momento.

Añade, además que, a escasos días de la entrada del verano, en Huelva como en otras provincias andaluzas o del sur de España, es prácticamente obligatorio el uso de aparatos de aire acondicionado así como sistemas de nebulizadores o aparatos de música para las terrazas que, con esta subida de la luz verá incrementada la factura alrededor de un 30%.

Un sector que, en palabras de Torres, pasará en verano una prueba de fuego para ver si sobrevive o cierra más de una persiana.