Un camionero borracho y drogado siembra el caos en la A-45 tras chocar contra la barrera

Los conductores que lo presenciaron dieron el aviso al 112 tras ver maniobras peligrosas

Fran Durán

Córdoba - Publicado el

2 min lectura

La Guardia Civil de Córdoba investiga al conductor profesional de un camión por arrojar una tasa de alcohol cuatro veces superior a la permitida y estar implicado en un accidente de tráfico ocurrido en la autovía A-45, a la altura del sur de la provincia. El suceso tuvo lugar el pasado 2 de julio y dejó daños tanto en el vehículo como en la infraestructura vial, concretamente en una barrera de seguridad metálica contra la que colisionó el tráiler.

Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, el incidente comenzó cuando varias llamadas alertaron al Centro de Operaciones de Tráfico (COTA) de que un camión-tráiler circulaba de manera errática en sentido Málaga, invadiendo los dos carriles de circulación y poniendo en riesgo al resto de usuarios de la vía. Los conductores que lo presenciaron dieron el aviso tras ver maniobras peligrosas que evidenciaban una posible conducción bajo los efectos del alcohol u otras sustancias.

Una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Lucena se desplazó inmediatamente al lugar, donde localizó el vehículo siniestrado. Los agentes comprobaron que el camión presentaba daños significativos en todo el lateral izquierdo como consecuencia del impacto contra la barrera metálica de la autovía, lo que confirmó el aviso de los conductores que dieron la voz de alarma.

Una vez identificado el conductor, de 54 años de edad, los agentes le practicaron las pruebas de detección de alcohol y drogas. El resultado fue positivo, con una tasa de 0,68 miligramos por litro de alcohol en aire espirado, cuando el límite legal para conductores profesionales es de 0,15 mg/l. Además, dio positivo de forma indiciaria en consumo de cocaína, un resultado que está pendiente de ser confirmado por los análisis de laboratorio correspondientes.

Ante estos hechos, la Guardia Civil ha abierto una investigación por un presunto delito contra la seguridad vial. El hombre se enfrenta ahora a penas que pueden ir desde tres a seis meses de prisión, o en su defecto una multa económica de entre seis y doce meses, o la obligación de realizar trabajos en beneficio de la comunidad por un periodo de entre 31 y 90 días. A todo ello se suma la retirada del permiso de conducir, que podría extenderse por un periodo de entre uno y cuatro años, según determine la autoridad judicial.

Este caso pone de nuevo el foco en la importancia del cumplimiento de las normas de seguridad vial, especialmente entre los conductores profesionales, cuya responsabilidad es aún mayor por el tipo de vehículos que manejan y el riesgo que pueden generar en carretera. Desde la Guardia Civil recuerdan que la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas multiplica el riesgo de accidente y pone en peligro tanto la vida del propio conductor como la del resto de usuarios de la vía.

La investigación sigue abierta, a la espera del informe definitivo sobre el consumo de drogas y las decisiones que adopte el juzgado competente en esta causa.

Temas relacionados