El rol invisible en la emergencia: los trabajadores sociales explican su función vital tras la catástrofe

Su labor es menos visible que la de sanitarios o policías, pero es fundamental para atender las necesidades psicosociales de las víctimas cuando los focos se apagan

Rubén López

Cádiz - Publicado el

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En medio del sonido de las sirenas y el despliegue de los equipos de primera intervención, existe un colectivo cuya labor comienza cuando los focos se apagan. Son los trabajadores sociales, los que, como explica Irina Sáenz, miembro del grupo especializado de intervención en emergencia de Andalucía, "quedamos" para gestionar el día después de la catástrofe.

El pilar psicosocial tras el impacto

La función de estos profesionales se centra en "atender todas las necesidades psicosociales que surgen antes, durante y después de la emergencia", señala Sáenz. Mientras los sanitarios y los cuerpos y fuerzas de seguridad se ocupan del impacto inicial, su equipo aborda las consecuencias humanas a largo plazo, un trabajo que se prolongó, por ejemplo, tras la reciente DANA.

Su atención se dirige especialmente a la población más vulnerable. "¿Qué ocurre con quien no tenga su tarjeta sanitaria, no pueda volver a su vivienda, no tenga familiares o haya perdido a gente?", se pregunta la experta. Los trabajadores sociales asisten a estas personas en la búsqueda de alojamiento, comida y en la reconstrucción de sus vidas tras el impacto.

Nadie está preparado para una catástrofe

Aunque la formación en emergencias les proporciona herramientas para mantener la calma, Sáenz admite que es "muy complicado", incluso para ellos. Son situaciones humanas y, en ocasiones, los propios profesionales "se desbordan o se desmoronan", requiriendo apoyo en grupo para procesar la experiencia vivida en primera línea.

Para una catástrofe nadie está preparado"

La crudeza de un desastre es algo para lo que "nadie está preparado", afirma rotundamente la trabajadora social. Explica que, ante un evento de esta magnitud, las personas damnificadas pueden perderlo todo: "es que pierdes todos los referentes que te hacen mantener tu cordura y tu estatus".

Pierdes todos los referentes que te hacen mantener tu cordura"

Simulacros: una herramienta fundamental

Por este motivo, Irina Sáenz califica los simulacros como una herramienta "fundamental". "Celebramos que se hagan", comenta, destacando que en otros países europeos los niños "están superacostumbrados" a este tipo de ejercicios, como los de terremotos. El objetivo final es que la población sepa lo que tiene que hacer en un momento crítico.

Pero la preparación va más allá del aviso institucional. Es crucial, según la experta, formar a la propia comunidad para poder "ayudar al que tiene al lado". Pone como ejemplo la situación de Cádiz, donde un vecino puede abrir su puerta "para que cualquier vecino se pueda refugiar". Saber si una persona mayor necesita ayuda o está en silla de ruedas es un conocimiento que los servicios públicos no siempre tienen y que el entorno sí puede aportar.

Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.