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El número 1 del PSOE en Mojácar, a COPE sobre la presunta compra de votos: "No estaba al corriente"

Cree en la inocencia de sus compañeros de partido detenidos y pide dejar actuar a la justicia.

ALMERÍA

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 11:30

El escándalo de la compra de votos en el municipio almeriense de Mojácar le ha estallado al PSOE a las puertas de las elecciones municipales de este próximo domingo.

Los siete arrestados en la jornada de este miércoles por su supuesta implicación en este fraude electoral han pasado la noche en los calabozos de la Guardia Civil, entre ellos dos socialistas incluidos en la lista electoral del PSOE de Mojácar, Cristóbal Vizcaíno, candidato número 5 y Bartolomé Flores, candidato número 2; éste último hijo de un ex alcalde del mismo partido. También hay empresarios de la zona.

La presunta trama trataba de captar votos por correo entre ciudadanos de origen latinoamericano. Les pagaban entre 100 y 250 euros a cambio de la papeleta a favor del PSOE. El vecino solicitaba el voto por correo, y una vez emitido, los miembros de la trama lo depositaban bajo su control en una oficina de Correos. En otras ocasiones llegaban a prometer un puesto de trabajo aunque se desconoce si en el Ayuntamiento mojaquero o en empresas relacionadas con los detenidos.

En los 10 registros practicados, los investigadores de la UCO se han incautado de votos por correo y también de listas censales en las que estaban marcados los nombres de determinados ciudadanos residentes en la localidad.

El PSOE suspenderá de militancia y abrirá expediente a los candidatos detenidos en Mojácar.

El alcaldable socialista, Manolo Zamora, ha señalado en COPE Almería que es ajeno a todo lo que está sucediendo y que "no estaba al corriente". Zamora insiste en que "le ha piladopor sorpresa".

Además, ha acusado al PP de cometer presuntas irregularidades, que él mismo ha denunciado hace unos días.

Pero Zamora es consciente de que la que está manchada es la imagen de su partido, el PSOE. Solo quedan dos días de campaña y la piensa afrontar "con la cabeza bien alta".

Cree en la inocencia de sus compañeros de partido detenidos y pide dejar actuar a la justicia.