El féretro con los restos del exfutbolista Paco Gento, fallecido este martes a los 88 años de edad, han abandonado ya la capilla ardiente instalada en el Palco de Honor del Santiago Bernabéu para trasladarse a su localidad natal de Guarnizo (Cantabria) para ser enterrado.

Los aficionados del Real Madrid pudieron despedirse este miércoles del cántabro, ganador de seis Copas de Europa y 12 Ligas con el conjunto madridista y también campeón de Europa con la selección española en 1964, cuyos restos han estado en la capilla ardiente que instaló el club para rendirle tributo el martes y este miércoles entre las 10.00 y las 13.00 horas.

Posteriormente, el féretro ha sido trasladado, entre aplausos de los aficionados que lo esperaban en la calle, a la localidad cántabra de Guarnizo, lugar de nacimiento del mítico extremo español, para ser enterrado "en la más estricta intimidad por expreso deseo de la familia", según anunció la entidad que preside Florentino Pérez.

Como sucediese en la tarde-noche del martes, además de los aficionados que se acercaron a decir el último adiós a una de las leyendas del club y su presidente de Honor, también se acercaron figuras del mundo del deporte.

Así, al igual que hiciese el martes, Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, este miércoles se acercó el máximo mandatario del FC Barcelona, Joan Laporta, acompañado por Enric Masip, asesor del dirigente, y por Xavi Puig, directivo responsable del fútbol femenino. También estuvieron presentando sus condolencias a la familia exjugadores como Rafa Marañón, miembro del Consejo de Administración del Espanyol, y Miguel Tendillo, embajador del Valencia.

Excompañeros como el uruguayo José Emilio Santamaría, que compartió vestuario con Gento en el Real Madrid, o José Ángel Iríbar, que lo hizo en la selección española y que también fue campeón de Europa en el 64, exjugadores como Raúl González, Vicente del Bosque, José Antonio Camacho o Ricardo Gallego o miembros de la primera plantilla como Luka Modric y Nacho Fernández también se pasaron por la capilla ardiente. Javier Fernández y Alejandro Hoz, alcalde de Astillero y alcalde pedáneo de Guarnizo respectivamente, también estuvieron en este último adiós en la capital.