El partido de Europa League entre el Athletic y el APOEL no ha comenzado bien en la capital bilbaína. Este miércoles, hay que dar cuenta de incidentes graves entre aficionados radicales. Según informó José Ángel Peña en El Partidazo de COPE, se han producido diversos incidentes que comenzaron a las diez de la noche en la zona próxima al casco viejo bilbaíno, en la que se enfrentaron aficionados de ambos equipos y efectivos de la Ertxaintza. Un grupo de 40 radicales del Athletic han agredido a unos 15 hinchas del APOEL en los alrededores del Teatro de Arriaga. El resultado ha sido de varios contusionados: el más grave, un joven chipriota que, con varios cortes en la cara, ha tenido que ser trasladado a un hospital.Tras ese primer enfrentamiento, los aficionados más radicales del equipo chipriota, unos 200 que se han trasladado a Bilbao, han comenzado a organizarse y ahora las fuerzas de seguridad temen que la capital se convierta en un auténtico campo de batalla este jueves.

Un grupo de aficionados radicales del Legia de Varsovia arrasaron esta madrugada un club de la capital polaca frecuentado por seguidores del Ajax de Amsterdam, horas antes de que ambos equipos se enfrenten en Holanda dentro de la Europa League.Varios hinchas encapuchados y vestidos de negro entraron en el local, apartaron a los clientes y destruyeron violentamente mobiliario, menaje y ventanas.Nadie resultó herido, según informan este jueves medios locales, mientras la policía investiga este nuevo episodio de violencia de una hinchada especialmente agresiva.

El pasado 18 de octubre los hinchas radicales del Legia protagonizaron enfrentamientos con la policía española en Madrid coincidiendo con el partido de Liga de Campeones que enfrentó al Legia con el Real Madrid (5-1). Antes, el 14 de septiembre de 2016, durante el encuentro en Varsovia entre el Legia y el Borussia de Dortmund (0-6), la hinchada polaca se enfrentó con la seguridad del estadio, usó bengalas y coreó cánticos nacionalistas y antisemitas. Ese comportamiento violento motivó la sanción de la UEFA contra el Legia, lo que obligó al club polaco a disputar su partido de vuelta con el Real Madrid (3-3) del pasado 2 de noviembre a puerta cerrada