4ª FERIA DE LA ALBAHACA
Roca Rey y Tomás Rufo salen por la puerta grande en Huesca en la despedida de Adame
El peruano y el toledano salen a hombros tras cortar dos orejas cada uno en una tarde en la que el coso oscense volvió a llenarse.
Tomás Rufo y Roca Rey, a hombros en Huesca
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Joselito Adame, se despedía del toreo en Huesca y los aficionados arroparan al torero mexicano, hasta el último minuto, ya que ha sido muy querido en la ciudad oscense y a pesar de que no tuvo una buena tarde, sobretodo con el acero, le premiaron los entusiasta aficionados que le obsequiaron con muchos aplausos, recuerdos y regalos en la vuelta al ruedo que dio al final de su lidia.
En el primero de su lote Joselito lo intentó tanto con el capote como con la muleta, pero el toro no embestía a pesar de que lo forzó por los dos pitones sacando en algún momento buenos pases de torero, incluso toreó de rodillas para levantar a los aficionados, aunque no tuvo suerte con el acero, llevándose los aplausos del respetable.
El cuarto de la tarde fue un calco de su anterior oponente, con pocas fuerzas, ya que le tocó el peor lote, y tan sólo le pudo sacar alguna tanda de derechazos y al natural y otra vez volvió a pinchar con la espada marchándose de vació de apéndices.
Roca Rey, que había despertado mucha expectación como cada año que torea en Huesca estuvo correcto en el recibimiento con el capote en las verónicas, y con la muleta ante un toro que no era fácil torearlo.
Realizó una faena aseada con pases con la mano derecha aunque fue mejor cuando cambió al natural, incluidos también algunos pases en redondo que tanto gustan a los aficionados. El torero peruano fue a más conforme pasaron los minutos, estuvo más valiente despachando al burel con una estocada trasera caída, siendo premiado con una oreja.
En el segundo de su lote Roca Rey, dándole bastante pases, volvió a torear igual que lo había hecho con su anterior toro con unas buenas tandas de derechazos; ya que le entraba mejor el animal por ese lado que al natural, aunque no se arrimaba mucho.
Cuando ya daba los últimos pases antes de entrar a matar fue volteado de forma alarmante y posteriormente al entrar a matar nuevamente fue otra vez cogido sin consecuencias ya que continuó y mató al tercer intento, pero como las dos cogidas habían sido espectaculares y siguió en la plaza los aficionados pidieron insistentemente la oreja, que le fue concedida.
Tomás Rufo tuvo una buena tarde en el coso taurino oscense, con un toreo clásico y de buen gusto, sacándole mucho provecho a su oponente, dándole tiempo para que se repusiera el toro, con pases ayudados por alto, con estilo y un toreo profundo que llegó a los tendidos, lo que, al matar de una estocada, le valió como premio una oreja.
En el que cerraba plaza también tuvo una buena actuación con buenas tandas de derechazos muy ajustados que gustaron a los aficionados, y otra entera al toro le valió otra oreja al de Talavera de la Reina.