2ª feria de san miguel

Morante, Juan Ortega y Marco Pérez, que corta un rabo, salen a hombros en Úbeda

El torero de La Puebla fue volteado sin consecuencias en su primero. Buena corrida de Juan Pedro Domecq y Jandilla.

Arenas de San Nicasio

Juan Ortega, Morante de la Puebla y Marco Pérez, a hombros en Úbeda

Redacción Toros

Publicado el - Actualizado

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La plaza de toros de Úbeda vivió este sábado un nuevo lleno de no hay billetes en la corrida que reunió a Morante de la Puebla, Juan Ortega y Marco Pérez, que salieron a hombros tras repartirse un total de siete orejas y un rabo. El festejo, marcado por la variedad de estilos y por un público entregado, contó con un lote de toros de Jandilla y Juan Pedro Domecq de juego desigual, con mayor presencia de opciones en los ejemplares de la primera ganadería. 

Morante de la Puebla abrió plaza con un toro de Juan Pedro Domecq de nobleza pero sin fondo. Logró momentos de plasticidad con el capote y tras ser volteado durante la faena de muleta, templó con la muleta hasta dejar una estocada que le valió las dos primeras orejas de la tarde. En su segundo, de Jandilla, supo imponerse con conocimiento y oficio a un animal de escasa transmisión, destacando varias tandas al natural. El pinchazo inicial redujo el premio a una oreja.

Arenas de San Nicasio

Momento de la voltereta sufrida por Morante en su primer toro

Juan Ortega recibió con elegancia al segundo, de Jandilla, en un saludo capotero que tuvo mucho ajuste. Con la muleta basó su labor en la mano derecha, aprovechando la movilidad y codicia del astado. Una estocada efectiva le permitió pasear dos orejas. El quinto, sin regularidad en sus embestidas, condicionó su faena pese a algunos pasajes estimables. Perdió trofeo con la espada y fue ovacionado.

Marco Pérez, sustituto de Roca Rey, protagonizó los momentos de mayor intensidad con el tercero de Jandilla. Tras un inicio entusiasta, ligó series con temple y firmeza que culminaron con una estocada certera, lo que le valió las dos orejas y el rabo. En el sexto, de Juan Pedro, con menor entrega, volvió a mostrar disposición y recursos para extraer muletazos estimables, aunque el fallo con los aceros le dejó sin premio tras escuchar dos avisos.