TOROS OLIVENZA

Alejandro Adame y Raquel Martín abren la Puerta Grande en Olivenza (Badajoz)

Antonio Castañares

Agencia EFE

Publicado el - Actualizado

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Antonio Castañares

El novillero mexicano Alejando Adame y Raquel Martín, que debutaba con picadores, han abierto este viernes la Puerta Grande de la plaza de Olivenza (Badajoz), el primero tras acreditar su oficio como novillero, y la segunda, en una fecha tan señalada para ella, con sus ganas de agradar

También la salmantina sacó a relucir un palpable amor propio que le hizo superar las condiciones de dos novillos que, dentro de lo interesante que fue el encierro de El Freixo, fueron los dos que más complicaciones presentaron.

Alejandro Adame repetía en Olivenza, tras haber hecho el paseíllo antes de la pandemia, y se ha visto que esta es una plaza talismán para él, pues ha demostrado que el tiempo no ha pasado en balde: Hoy es un novillero con un buen concepto del toreo, de raíz clásica, que sabe colocarse y correr la mano con suavidad para torear asentado, ligando los muletazos en series intensas.

Tuvo un buen lote, en el que entró el bravo y enclasado primero, al que toreó a la verónica con manos bajas y posteriormente muy variado en un quite por tafalleras y saltillera, muy mexicano en los lances.

Faena muy lograda la que hizo a ese novillo, dejándole la muleta puesta para ligar los muletazos por ambos pitones, en ocasiones a cámara lenta, pues así de despacito embistió también el animal. Muy frío el público con él, no le pidió la oreja que mereció a todas luces. Saludó una ovación.

A portagayola se fue a recibir al cuarto, un punto descompuesto en los lances iniciales, pero con el que se centró Adame en verónicas de buen concepto. Espectacular fue también un quite por zapopinas.

La faena de muleta tuvo las mismas premisas e insistió por el buen pitón izquierdo, respondiendo con temple, mano baja y trazo largo al celo del utrero. Estocada recibiendo y dos orejas.

Raquel Martín cortó las dos orejas del tercero, al que recibió soltando los brazos y embarcándole con el capote. La volteó el animal, que se acostaba por el pitón derecho, pero, valiente la novillera, no le volvió la cara.

No le cortó el viaje en el comienzo de faena, que inició rodilla genuflexa, para después robarle los muletazos de uno en uno a un animal que no fue fácil, pero con el que demostró mucha voluntad la joven novillera. Gran estocada y dos orejas.

Con el sexto volvió a mostrarse voluntariosa ante otro animal que desarrolló complicaciones y con el que acabó atáscándose con los aceros, tanto que dio tiempo a que sonaran hasta dos avisos.

Lalo de María mostró también sus ganas de agradar, pero con desigual suerte. Ante el noble segundo fue desarmado varias veces, lo que deslució el trasteo.

Y con el bravo y enclasado quinto, que parecía que se quería comer la muleta, el novillero francés llevó a cabo una faena con altibajos y mal rematada con la espada, igual que ocurriera en su anterior novillo.

FICHA DEL FESTEJO.- Seis novillos de El Freixo, bien presentados. Bravo y con clase el primero; noble, pero justo de transmisión el segundo; reservón el tercero; bravo, exigente y un punto áspero el cuarto; bravo y enclasado el quinto; deslucido, sin recorrido el sexto.

Alejandro Adame, de azul marino y plata: Pinchazo y estocada (ovación); estocada recibiendo (dos orejas).

Lalo de María, de carmelita y oro (debutaba con picadores): Tres pinchazos, estocada y descabello (silencio tras aviso); tres pinchazos y casi entera (ovación).

Raquel Martín, de purísima y oro (debutaba con picadores): estocada (dos orejas); cinco pinchazos y numerosos descabellos (silencio tras dos avisos).

En cuadrillas, Curro Javier saludó tras banderillear al quinto.

La plaza registró tres cuartos de entrada en los tendidos.