España, en aviso por temperaturas por encima de 40 grados: cuándo llega la ola de calor, zonas afectadas y la única comunidad que se salva

Aunque parecía una tregua breve, lo que se avecina no es simplemente calor: es un episodio que, según la AEMET, podría marcar un antes y un después en este arranque de temporada

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Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El verano ha llegado con fuerza y pocas treguas. El sol lleva semanas instalado sobre la península y el ambiente seco, las noches calurosas y los termómetros rebeldes se han convertido ya en parte del paisaje diario. Muchos ya han desempolvado los ventiladores, cambiado las sábanas por sábanas de lino y, los más afortunados, hacen lo posible por escaparse del calor infernal a las zonas que, por ahora, sí parece que los termómetros están respetando.

Pero no es solo una sensación: los expertos confirman que lo que está por llegar no será un simple episodio caluroso. A partir de este sábado, una nueva irrupción de aire procedente del norte de África transformará el calor en un fenómeno mucho más serio, con registros que podrían alcanzar e incluso superar los 42 grados en varios puntos del país. Todo apunta a que se tratará de la primera ola de calor oficial de este verano, según avanza la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en un comunicado especial.

 Las zonas más castigadas 

Aunque durante junio ya se habían notado temperaturas inusualmente altas para la época, no se había llegado a hablar de ola de calor porque no se daban las condiciones técnicas que la definen: intensidad térmica, extensión geográfica y duración. Ahora, los tres factores parecen coincidir.

Guillermo Morales

Un termómetro marca temperaturas cerca de 40º en Córdoba, imagen de archivo

La combinación de una atmósfera muy estable y la llegada de una masa de aire muy cálida y seca provocará un ascenso térmico progresivo a lo largo de los próximos días. A partir del viernes se espera que este fenómeno se extienda a gran parte del territorio peninsular, intensificándose el fin de semana en regiones como el valle del Guadalquivir, el valle del Ebro y la meseta sur. En estas áreas, se podrían alcanzar los 40 o incluso 42 grados, especialmente entre el domingo y el lunes, considerados los días más críticos del episodio.

Las mínimas tampoco darán tregua. En muchas zonas del sur y del noreste, especialmente en el valle del Ebro, no se bajará de los 23–25 ºC por la noche, dificultando el descanso y aumentando el riesgo de noches tropicales.

La AEMET advierte también de la posible presencia de calima a partir del domingo, ya que la masa africana podría llegar acompañada de polvo en suspensión. Este fenómeno, unido a la nubosidad alta prevista, podría alterar ligeramente las previsiones térmicas, aunque no se espera que reduzca de forma significativa el calor extremo. Las mínimas tampoco darán tregua. En muchas zonas del sur y del noreste, especialmente en el valle del Ebro, no se bajará de los 23–25 ºC por la noche, dificultando el descanso y aumentando el riesgo de noches tropicales.

CANTABRIA, FUERA DEL FOCO

Pese a que buena parte de España quedará bajo este nuevo “dominio térmico”, algunas zonas se librarán en mayor o menor medida. Es el caso del área cantábrica y el cuadrante noroeste, donde la influencia de un flujo atlántico más fresco mantendrá a raya los termómetros. Cantabria, concretamente, se presenta como una especie de oasis térmico en medio de un panorama abrasador.

Este respiro llega gracias a una circulación atlántica que mantendrá el ambiente más húmedo y templado en la región, lo que evitará que las máximas se disparen como en el resto del país. Así, quienes puedan desplazarse o vivan en esta zona tendrán un alivio frente a lo que se prevé como uno de los episodios más sofocantes del verano.

EFE

Varias personas se bañan en la playa de los Peligros en Santander

En cuanto a Canarias, la influencia del aire sahariano afectará especialmente a las islas orientales durante el viernes y el sábado, elevando las temperaturas, aunque sin alcanzar valores suficientes ni prolongados como para hablar de una ola de calor propiamente dicha.

Si no hay cambios significativos, se espera que a partir del miércoles siguiente comience un ligero descenso térmico por el oeste peninsular, que podría extenderse al norte en los días posteriores. Sin embargo, en el suroeste el calor podría prolongarse aún algunos días más. Habrá que esperar para saber si esta es solo la primera advertencia seria del verano… o el inicio de un largo reinado del calor.

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