Línea Editorial 2/06/2021

Madrid-Rabat: una crisis de confianza

El "caso Gali" ha abierto una crisis de confianza en las relaciones que se centra en el auténtico meollo del problema: el conflicto del Sahara Occidental

Tiempo de lectura: 1' Actualizado 12:09

Cuando está en riesgo la seguridad exterior e interior de España, como sucede al hilo del rompecabezas de las relaciones con Marruecos, es de sentido común que los partidos políticos ofrezcan su total apoyo a la defensa de la integridad territorial. Pero este principio no impide que se critiquen las torpezas cometidas por el Gobierno de Pedro Sánchez. Y lo cierto es que ha mostrado un profundo desconocimiento de lo que significa Marruecos en la historia de España. Con el trasfondo del Tratado de Amistad, Cooperación y Buena Vecindad con Marruecos, el Ejecutivo español debió informar a Rabat sobre la hospitalización de Brahim Gali, aunque solo fuera para privar a los marroquíes de sus pretextos para desatar esta crisis.

Ahora nos encontramos con que el "caso Gali" ha abierto una crisis de confianza en las relaciones que se centra en el auténtico meollo del problema: el conflicto del Sahara Occidental, que Marruecos trata de resolver a las bravas, tras el reconocimiento por Estados Unidos de su soberanía sobre el territorio. Y ahí, realmente, España apenas tiene margen. Como antigua potencia administradora debe moverse en el marco de las resoluciones de la ONU, y no ceder a una campaña de presión.

Sería necesario que Madrid y Rabat enderezaran esta crisis para proteger la estabilidad y la seguridad en la zona, que ambos países necesitamos. Un buen comienzo sería el retorno de los menores marroquíes, que el rey Mohamed VI dice querer facilitar. Se trata de ver si Marruecos desea un retorno a la confianza mutua, o pretende prolongar esta crisis.