Descarte de personas con Síndrome Down

Escucha ya la Línea Editorial de este sábado 6 de mayo

José Luis Restán

Publicado el - Actualizado

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La empresa Mattle, fabricante de la famosa muñeca Barbie, ha sacado al mercado un nuevo modelo. Tiene una forma más redondeada, orejas más pequeñas, puente nasal más plano y ojos almendrados. Y en las palmas de las manos tienen una sola línea. Son rasgos físicos característicos de las mujeres con Síndrome de Down. Esta muñeca incorpora, además, un collar con tres flechas que representan el tercer cromosoma 21, el cromosoma 'extra', cuya presencia determina genéticamente este síndrome.

Tenemos una Barbie con Síndrome de Down, pero cada vez tenemos menos personas con Síndrome Down. Hace unos días se publicó el estudio “Demografía del Síndrome de Down en el mundo”. Este estudio señala que en España hay cinco nacimientos de bebés con Síndrome Down por cada 10.000 nacimientos. Hay una tendencia importante al descenso de la natalidad de personas con este síndrome en todos los países, pero el caso de España llama especialmente la atención. Cada vez es más frecuente que, una vez identificadas en el seno materno, se proceda al aborto. En 40 años, la población Down ha descendido un 88% en España y se encamina, según las previsiones, a que no haya ningún nacimiento en 2050.

Estamos ante lo que el Papa Francisco denuncia como la cultura del descarte, que en este caso se aplica a los no nacidos. Todos los que no entran en unas falsas categorías de normalidad, como los ancianos, los no nacidos, los pobres, los inmigrantes o los discapacitados corren el riesgo de ser, de una u otra forma, descartados.