La Junta de Castilla y León ha concedido la Medalla al mérito profesional a título póstumo a María Hernández Matas, cooperante salmantina asesinada en Etiopía en junio pasado.

Esta distinción trata de reconocer los valores humanos y profesionales de la trabajadora humanitaria a favor de los colectivos más vulnerables.

La cooperante María Hernández Matas, originaria de Sanchotello (Salamanca), fue asesinada el pasado 25 de junio mientras realizaba diversas labores humanitarias en Etiopía para la organización Médicos Sin Fronteras.

En el acuerdo para la concesión, realizada a iniciativa del consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, se ha reconocido las relevantes cualidades y valores que la constituyen como merecedora de la distinción por su trabajo en favor de la paz, la solidaridad, el respeto a los derechos humanos y la cooperación al desarrollo.

Se ha destacado su valentía y su profundo y honesto compromiso por el trabajo humanitario dedicado a los colectivos más vulnerables del mundo.

Un trabajo, compromiso y sacrificio que, según se destaca en el acuerdo, sirve de símbolo e imagen del trabajo de todos los cooperantes y trabajadores humanitarios, que personalizan y hacen visible el compromiso en aras del fomento de la paz, la solidaridad, la tolerancia y el respeto de los derechos humanos.

María Hernández Matas, licenciada en Economía, comenzó a trabajar en Médicos Sin Fronteras en 2015 como coordinadora financiera en la República Centroafricana.

También desempeñó labores de coordinación de proyectos en países como Sudán del Sur, Yemen, México o Nigeria. Entre octubre y diciembre de 2020 fue destinada a Tigray (Etiopía), zona que vive una importante crisis humanitaria y un conflicto social, situación que fue denunciada públicamente por la cooperante en varias ocasiones.

Durante su segundo viaje a este lugar, en junio de 2021, fue asesinada junto a su compañero de la organización, Yohannes Halefom y el conductor del coche que los transportaba, Tedros Gebremariam.