La alcaldesa del municipio valenciano de Llaurí, la socialista Ana María González, ha aceptado pagar una multa de 960 euros y la retirada del carnet de conducir durante 8 meses tras haber dado positivo el pasado sábado en un control de alcoholemia.

El juicio rápido se ha celebrado este lunes por conformidad de las partes en el Juzgado de Instrucción número 20 de Valencia, que se encuentra en funciones de guardia de incidencias, según informa el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

La acusada ha aceptado las penas solicitadas por la Fiscalía en su escrito de acusación por la comisión de un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas; en concreto, una multa de 4 meses a razón de 8 euros de cuota diaria (total de 960 euros) y la retirada del permiso de conducir durante 8 meses.

La sentencia ha sido declarada firme y será remitida a un juzgado de lo Penal de la ciudad para su ejecución, añaden desde el TSJCV.

Tras conocer estos hechos, su partido ha anunciado que iniciará un expediente informativo para analizar lo sucedido en este caso concreto y valorar las posibles repercusiones.

El PSPV-PSOE ha manifestado "su firme compromiso con el cumplimiento de la legalidad en todas las circunstancias" y ha reivindicado que "todas las personas deben tener el mismo trato ante la ley".

En este sentido, ha dicho que ante una situación complicada, el partido "estudiará el caso desde el máximo respeto a la legalidad y la acción de la justicia".