El Ayuntamiento de Sevilla ha trasladado al pabellón polideportivo San Pablo a los 68 ancianos evacuados con heridas leves o ilesos tras el incendio de la residencia en la que viven, en el que ha muerto una mujer de 80 años y tres personas más han resultado heridas graves y hospitalizadas.

Según ha informado Emergencias del Ayuntamiento en sus redes sociales oficiales, todas las personas que han sido desalojadas en el incendio de la residencia en calle Baltasar Gracián han sido trasladadas al centro deportivo, en la avenida de Kansas City.

El Ayuntamiento ha habilitado la pista central del pabellón para ubicar una serie de camas improvisadas para que los ancianos pasen la noche, mientras que se ha instalado un punto de información a sus familiares en una de las puertas del recinto, ya que por el protocolo de prevención ante la covid no pueden acceder a las instalaciones deportivas.

Todos los ancianos desalojados han sido ya ubicados en el pabellón, con patrullas policiales y servicios sanitarios que estarán con ellos toda la noche para atenderles en lo que precisen.

Según han informado el 112 y Emergencias del Ayuntamiento, sobre las 22.40 horas del martes se ha recibido un aviso que alertaba de que se había iniciado un incendio en la citada residencia, a donde se dirigieron de forma inmediata un operativo de bomberos, Policía Local y Emergencias Sanitarias.

La Policía Local cortó el acceso a la calle y avisó de que no se circulara por ella, informando en sus redes sociales de que era "preciso despejar las vías para acceso y salida de los servicios de emergencias, mientras que el Ayuntamiento activaba el plan de emergencias local.

En la zona, situada cerca de la estación de Santa Justa, se encuentran decenas de vecinos que han salido a la calle en una noche gélida para ayudar en lo que puedan los ancianos, aportándoles mantas y mascarillas, ya que han salido a la calle a toda prisa solo con el pijama o batas, con la temperatura rozando los cero grados.

La residencia de ancianos en la que se ha producido el incendio tiene una capacidad para 108 personas.

Para sacar a los residentes a la calle se tuvo que organizar una cadena humana, que fue trabajando de forma coordinada para poner a los ancianos fuera de peligro.

Se desconocen las causas del incendio, aunque se cree que ha podido empezar en la tercera planta de la residencia, donde se centran las labores de los bomberos. EFE

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