La Fiscalía pide en sus conclusiones provisionales 51 años de prisión para un hombre acusado de asesinar a dos personas y herir a otra en un bar de copas de Alcorcón en la madrugada del 19 de marzo de 2017, por lo que será juzgado a partir del martes próximo en la Audiencia Provincial de Madrid.

También se sentará en el banquillo la expareja sentimental del anterior acusado, que se enfrenta a una petición del Ministerio Público de seis años de cárcel como presunta encubridora.

En su escrito de acusación la Fiscalía señala que entre las cuatro y media de la madrugada y las seis y media de la mañana de la fecha referida el acusado acudió al local de copas en cuyo interior se encontraba el propietario del establecimiento, una persona con la que el acusado no tenía buena relación y su pareja.

Añade que tras cruzar unas palabras con el dueño del local el acusado salió del mismo y regresó minutos después con una pistola semiautomática y sin mediar palabra, "con la intención de acabar con la vida de todos los que se encontraban en el local" comenzó a disparar.

El fiscal explica que el acusado disparó en primer lugar "de manera totalmente sorpresiva e inesperada" al dueño del bar, que se encontraba detrás de la barra, al que mató y después a la mujer, que también falleció.

Agrega que el acusado disparó también al hombre con el que tenía mala relación cuando trató de abalanzarse sobre él y este recibió el impacto de una bala en un muslo antes de caer al suelo.

No obstante logró agarrar al acusado, que trató de zafarse golpeándole con un taburete en la cabeza mientras le decía "muérete muérete".

En el transcurso del forcejeo al acusado se le cayó la pistola con el silenciador que portaba y salió huyendo del local, siempre según el Ministerio Público.

Fue detenido el 21 de febrero de 2018 cuando se encontraba repostando combustible y adquiriendo productos alimenticios en una estación de servicio de la localidad madrileña de Guadarrama en compañía de la otra acusada, con la que había tenido una relación sentimental que finalizó en diciembre de 2016.

Según la Fiscalía la acusada sabía que su expareja podría haber sido el autor de los disparos en el interior del local y que desde entonces le buscaba la Policía pese a lo cual le ayudó para sustraerse a la acción de la justicia.

El Ministerio Público explica que la acusada le habría ayudado a ocultarse durante varios días proporcionándole un lugar para dormir y comida y ayudándolo en sus desplazamientos. EFE