FADE desconfía del acuerdo alcanzado por el Gobierno del Principado con la plantilla de ITVASA

La Federación Asturiana de Empresarios (FADE) ha manifestado este jueves su desconfianza por el acuerdo alcanzado por el Gobierno del Principado con la plantilla de ITVASA tras tres meses de huelga con 33.000 afectados y ha calificado de "oportunidad perdida" una solución del conflicto que cree "no será definitiva" y llama a abrir el servicio a la competencia.

Los empresarios asturianos coinciden en que el fin de la huelga es una buena noticia, pero creen que la vía aplicada no soluciona "el fondo del problema". La presidenta de FADE, María Calvo, ha afirmado que la solución dada por el Gobierno de Asturias al conflicto de la ITV "hace cesiones que sientan precedentes peligrosos, mientras no se aborda la cuestión verdaderamente importante: la eficacia del servicio que debe ir ligada a la productividad".

Por tanto, señala Calvo, "no dan respuesta al fondo del asunto y solo responden a la defensa de un sistema público de gestión que, en lugar de ser penalizado por los problemas causados a los ciudadanos, parece ser recompensado. En la mano del Principado estaba haber abierto el servicio a la competencia y poner fin de forma definitiva a un problema singular de nuestra región".

La responsable de FADE sostiene que este acuerdo "se salda con 33.000 vehículos en lista de espera, que no será sencillo recuperar; elevados costes acumulados para las empresas del sector, que la administración no va a cubrir; un probable encarecimiento del servicio y una puerta abierta a que el conflicto se reabra en cualquier momento".

A la presidenta de los empresarios se han sumado otras voces del transporte asturiano. El presidente de Cesintra, Alejandro Monjardín, considera que, pese al acuerdo, "los asturianos seguirán teniendo peores servicios y los transportistas que ir a pasar inspecciones a otras comunidades autónomas". Desde su organización empresarial reclaman un "buen servicio" que, cree, solo se conseguiría "abriéndolo a la competencia" y teme que "pronto" la crisis se vuelva a reabrir.

Por su parte el presidente de UEAS, Rubén Castro, ha señalado que son "los mismos usuarios y empresas privadas que han soportado la huelga y cargado con los costes de desplazarse a otras comunidades para recibir el servicio quienes vamos a tener que cargar con los sobrecostes que conlleva el acuerdo ofertado desde el Gobierno".