Los Mossos han detenido a dos jóvenes de 19 y 20 años como presuntos integrantes de un grupo que robaba los datos bancarios a través de mensajes SMS maliciosos a móviles y correos, que falsificaba tarjetas de crédito con las que compraron por más de 75.000 euros y que vendía también material robado, del que se les ha incautado objetos por valor de 164.000 euros.

Los Mossos informan este sábado en un comunicado de que las detenciones las practicaron el pasado lunes agentes de la comisaría de Premià de Mar (Barcelona) en el marco de una operación que comenzó en enero y que no dan por cerrada.

Investigan a otras cuatro personas, tres de ellas en busca y captura, como integrantes del grupo criminal, que también cometió robos con fuerza y hurtos.

Los estafadores, según los Mossos, enviaban mensajes maliciosos de presuntas empresas de transporte o de Correos en los que se reclamaba un pago de 1,99 euros de un trámite necesario para recibir un paquete, método conocido como "phishing" o "smishing".

Con el pago, los estafadores conseguían las claves bancarias de las víctimas y falsificaban tarjetas de crédito.

Los hechos se remontan a enero de este año, cuando la policía catalana tuvo conocimiento de que un menor de edad hacía compras fraudulentas en un establecimiento de Premià de Mar.

El menor les explicó que, a cambio de dinero, compraba teléfonos con varias tarjetas de crédito a nombre de personas diferentes.

Posteriormente, los entregaba a un hombre que los Mossos identificaron y que tenía antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio.

La investigación además permitió vincular el uso fraudulento de tarjetas falsificadas con una estafa masiva, hecha con mensajes SMS y por correo electrónico, en todo el territorio español.

El grupo enviaba mensajes de entidades bancarias a las que suplantaban, en las que decían a las víctimas que su cuenta había sido vulnerada y debían cambiar la contraseña mediante un enlace que redirigía a la víctima a una web en la que se hacían con sus datos.

Una vez obtenidos, los estafadores hacían compras en establecimientos, que sumaron unos 75.000 euros, a través de diversos móviles ya que utilizaban el sistema "contactless" sin necesidad de introducir el número PIN.

Se han confirmado varias adquisiciones en las poblaciones catalanas de Premià de Mar, Mataró, Badalona, Barcelona y Roda de Barà.

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Además, se han presentado denuncias en Sabadell, Albacete, Madrid, Melilla, Sevilla, Ibiza, Marbella y Ciudad Real, por lo que los Mossos están colaborando con la Policía Nacional y la Guardia Civil.

Además de los arrestos, el pasado lunes se practicaron tres registros en las localidades barcelonesas de Badalona, Sant Adrià de Besòs y Premià de Mar, en los que se han encontrado una gran cantidad de móviles de gama alta y ordenadores, así como un datáfono para el cobro del material robado que han vendido.

Los Mossos estiman que han resuelto unos noventa hechos delictivos entre hurtos, robos con violencia e intimidación y dan por desarticulado uno de los puntos más activos de recepción de material robado en Badalona. Se han recuperado 169 teléfonos móviles (61 robados), cuarenta ordenadores, tres tabletas y 2.500 euros en efectivo.

Los agentes sospechan que se pretendía enviar todo este material al extranjero con una empresa de paquetería.